Más que una nube perdida,
me voy colando, entre el agua
y las rocas, río abajo,
rozando con las rocas,
reflejando el sol de los recuerdos,
el azul de mi camisa favorita.
Más que una nube viajera,
recorrí el océano de los sueños,
viajé hasta tu orilla más cercana,
para al fin encontrarte,
dibujado en la arena.
Porque soy nube que huye,
que se esconde,
que no sabe cómo,
ni donde esperarte,
para descansar entre el horizonte.
Pero ... ¿Y si jugamos a ser agua?
de vez en cuando,
podemos llover sobre el campo más lejano,
fluir en el Amazonas o en el Nilo,
ir al Atlántico o al Pacífico.
Dime amor, el mundo es nuestro,
nos quedaremos dibujados en la playa,
mientras las olas se llevan nuestro recuerdo,
porque quizás sea bueno,
que entre la espuma quede la historia,
que hubieron nubes que decidieron,
irse con la tormenta,
para besar por un momento,
el mundo donde comenzó nuestra tregua.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.
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