miércoles, 16 de junio de 2021

LO QUE MÁS AMO DE TI.

Lo que más amo de ti

lo que me roba el pensamiento

cuando te siento ausente...

son el sonido de tu voz

como una melodía celestial

que domina mis emociones...

 

Lo que más amo de ti

es el aroma de tu presencia

que me sigue a donde voy

y en la distancia que nos aleja

que me recuerda cuanto te amo...

que me hace extrañarte demasiado...

 

Lo que más amo de ti

son nuestros momentos

que llenan mi corazón de alegría

y hace temblar mi alma

y mis sentidos...

cuando estás tan cerca...

 

Lo que más amo de ti

es cuando necesito decirte

cuanto te amo...

pero tú con tu mirada

te apoderas de mi voz

y me haces hablarte en silencio...

 

Lo que más amo de ti

es tu forma de besar

de acariciar...

lo que más amo de ti

es tus manos en mis manos

que hace vibrar mi vida...

 

Lo que más amo de ti

lo que me haces sentir

aún en la lejanía

aunque el tiempo sea tan largo

cuando no estás cerca de mí...

 

Lo que más amo de ti

es cuando te vuelves

todo mi mundo...

con tu presencia mágica

es saberte cerca...

es que tu hermosa sonrisa

haga brillar mis ojos

y sanar mis heridas...

 

Lo que más amo de ti

son todo eso que me recuerda el amor

tus besos, tus palabras

tu forma de amar

que se pierden en mis pensamientos

y tocan mi corazón...

Es la pureza de tus labios

que hacen temblar los míos

es mi mirada que se pierde

en la belleza de tus ojos...

y en todo lo que amo de ti...

...tú....

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

SIN IMPORTAR LA DISTANCIA.

Aunque estés lejos físicamente

Siempre estás en mi corazón

Nos conectamos a miles de kilómetros

Nos conectamos con un beso

Que rompe todas las distancias.

 

Pareciera una locura amarnos

una locura de amor muy de nosotros

Pareciera que nada nos impide sentir

Nada nos impide habernos

Porque nos hablamos con el corazón.

 

Sin importar la distancia

Solamente sentimientos que nos unen

La alegría de saber te

Y que piensas en mi...

Como yo en ti...

 

Sin importar la distancia

solamente el amor en nuestros corazones

y lo nuestro que nos une

esperando tus mensajes con ansias

y el deseo de verte cerca por primera vez

tocarte, sentir tu piel...

 

Sin importar la distancia

ni lo que la gente diga

sin importar nada más que tú y yo

y las emociones que nos mantienen

enamorados....

 

Sin importar la distancia

solamente tú y siempre tú

que cambiaste mi vida

con tu voz, con tus palabras

solamente importa el momento

de hablar contigo

de escucharte y verte...

 

Sin importar la distancia

y el largo camino que se acorta

con todo eso que es parte de los dos

con la miel de nuestro amor infinito

no existirá nada que nos separe!

 

Sin importar la distancia

nuestro amor elimina cada día

cada kilómetro que nos separa

y cada mañana, cada noche...

y en cada suspiro al llegar el atardecer

te llevo conmigo en mis pensamientos...

 

Sin importar la distancia

te amaré otra vez...

porque impactaste mi alma

con tu amor....

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

TE AMARÉ.

Te amaré

Aunque el tiempo intente robarme

tu hermosa sonrisa...

 

Te amaré

hoy más y siempre hasta el final

de cada mil años

 

Te amaré

porque no tengo otro sentir

más que amarte...

 

Te amaré

aun cuando estés distante

porque siempre estás en mi corazón

 

Te amaré

Aún cuando llegue el silencio

sin tu voz

que calma mis tempestades...

 

Te amaré

porque tu sanaste mis heridas

cuando apareciste de pronto

en mi vida...

 

Te amaré

con cada rosa

que lleva tu belleza

que se roba el brillo del sol

en cada mañana.

 

Te amaré

con el corazón

porque siempre

te encuentro allí

cuando te siento lejos...

 

Te amaré

sin palabras, aún sin tu presencia

sin tu sonrisa

que hace brillar mis noches oscuras...

e ilumina mis días grises...

 

Te amaré

te amaré...

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

TU BELLEZA.

Te robaste la belleza de las flores

porque cada día brillas como el sol

que no deja de iluminar

ahuyentando la oscuridad

te meces con la suave brisa

y el angelical toque de tu sencillez

como hermosas rosas

escondidas entre la silenciosa

tarde y los sueños

que se visten de ti...

del encanto de tu mirada

de tus labios con un hermoso color

que envidian los rubíes...

porque proyectan el amor puro

la belleza única que

es irresistiblemente amada desde lejos

desde la distancia de kilómetros

y tiempos...

no creí conocer tanta belleza

nunca creí sentirme tan feliz

hasta que te conocí a ti

en un momento que dejaba

de creer en el amor...

hasta que te conocí

y escuché...

tu delicada y exquisita

voz que hizo vibrar mi alma

y alegrar mi corazón...

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

miércoles, 9 de junio de 2021

PARA VIVIR LO QUE FALTA.

Todo se queda pequeño,

cuando el infinito mira,

todo se agranda y se estira,

cuando quien mira es pequeño,

más allá de lo finito,

más grande parece el día.

 

La mar, besa cada grano,

de la playa que la espera,

y las arenas bailando,

agradecen sus caricias,

entregada a sus abrazos,

cada ola es un enigma.

 

Y de la efímera espuma,

el bello rostro surgió,

como una ninfa translúcida,

un suspiro del amor,

de una fuente cristalina,

como un néctar de ilusión.

 

Del Universo emergió,

coros de voces nacieron,

pletórico el Sol brilló,

y un lucero amaneciendo,

prestó su luz sin pudor,

y enrojeció el firmamento.

 

El cielo cerró los ojos

para mirarse por dentro,

y vio danzar al amor,

con el corazón latiendo,

preludio de la emoción,

que bullía en su interior.

 

Buscó la lágrima el rostro,

miró el aire la pupila,

y se llenaron los ojos,

de la verdad que nacía,

y en su mirada suicida,

quedó reflejado todo.

 

Quiere el beso ser la lanza,

y la voz quiere ser daga,

quiere el amor ser la balsa,

que contracorriente vaga,

quiere ser la mano el remo,

y los ojos la esperanza.

 

Como amapolas los versos,

sabedores de injusticias,

conocedores del tiempo,

sin ponerse de rodillas,

y un rosal pleno de espinas,

crece junto a la templanza.

 

Se va quedando pequeño,

el tiempo que nos separa,

y el verso va endureciendo,

las cuerdas de la guitarra,

canto y grito, seduciendo,

para vivir lo que falta.

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

¿DÓNDE ESTÁ LA AMISTAD?

¿Dónde está la amistad cuando la llamo?

Hoy estoy solo, mis amigos se han ido,

no quieren saber nada de los perdedores.

Pero yo en vez de llorar bebo y sonrío,

ya no voy a dejar que nada me hunda,

ni que me empujen al odio o al suicidio.

Voy a enterrar mi hastiado corazón

en el cementerio de la tierra del olvido.

Seré insensible como la dura piedra,

mis cariños estarán siempre dormidos,

no sentiré nunca pasión ante los besos,

ni confiaré más en los falsos amigos.

 

¿Dónde está la amistad verdadera?

Esa que sin pedir nada, se entrega,

esa que lo da todo, nada espera.

A veces la encuentras sincera,

otras veces falta de veras,

seamos amigos verdaderos,

nunca hagamos de la amistad un vertedero.

 

¿Dónde está la amistad que quise alcanzar,

aquella inamovible como ninguna

esa migaja que sonríe en hambruna

aquel ente tangible para abrazar?

 

Acá, allá, más allá la quise encontrar

la busque en agua clara en cada laguna,

también en el lado oscuro de la luna

y simplemente se quería ocultar.

 

Una cuarta parte amistad que he encontrado

divide egoísmo y oportunidades

buscando todavía un mejor costado.

 

Otra parte se divide en vanidades

amistad indiferente o regalado

que ocultan secretos y nuestras verdades.

 

Donde está la amistad inocente?

La que tocaba a la puerta, aun no estando presente

Aquella que llamaba a mi mente, estando al otro lado de la ciudad

Y hoy le queda más grande la pequeña palabra ausente.

A donde han ido a parar, aquellos amigos de universidad?

Que daban valor a los años compartidos que nuestra edad

Me tuvieron siempre presente en juegos

Y se han despedido en el centro de este mar de desaliento y heridas

Quien diría que existe aún en mí un niño, capaz de sentir mi soledad.

Mas es parte de la vida, cada llegada viene con una despedida

Fueron muchos los años y edades que fueron juntas recorridas

No se enmenda de forma tan simple,

pasa a ser desconocido aquellos quienes te olvidan

Así es que, ¿dónde está la amistad?

No hay tal cosa tan definida

Pues cuando se extingue una vela,

aparecen mil nuevas encendidas.

 

La amistad está donde está un amigo.

Y sí tú dudas de ello, hay que probar.

Si, en tu fracaso, ese que llamas “amigo”,

se esconde y no responde, al llamar;

deja de decirle amigo, no está contigo.

Llamar amigo a cualquiera no se debe,

Al amigo hay que conocerlo antes.

No será amigo hasta que se compruebe.

Y si no le conoces amistad, no cantes.

 

Donde anidará aquella amistad

con la que compartiré los días solitarios,

Las semanas trágicas.

Las veredas donde las sombras se lamentan.

Mas no basta la compañía de mi reflejo.

Donde andará aquella amistad

A la que tanto espero,

mas en el desespero acepte esta decidía

y la soledad que en esta coraza anida

 

¿Dónde está la amistad?

Pues muy simple

La amistad esta en mi corazón,

la amistad no está fuera de mí, más bien está dentro de mí.

Donde está la amistad?

Está en cada amanecer,

en cada atardecer

y en cada anochecer.

Esa amistad la encuentro en el silencio de mi habitación;

esa habitación que mía.

Es en el recinto más sagrado y sosegado que tengo.

El que entra en esa habitación es el verdadero amigo.

 

Elusiva eres compasiva Amistad

si te resuelves en mero Afecto

y no llegas a la rica Intimidad

del comprometido cariño selecto.

Te prefiero en la egregia Devoción

del sosías leal si llega la caída

por la tenaz y suprema Inclinación

cuando todos se nos van en estampida.

 

EN LOS MOMENTOS DE TRISTEZA Y SOLEDAD

NOS PREGUNTAMOS HERMANO

A DONDE ESTÁ LA AMISTAD

ESA QUE TE TIENDE LA MANO

SIN ESPERAR NADA A CAMBIO

QUE TE ACOMPAÑA Y TE ANIMA

DONDE SOLO HAY INTERCAMBIO

DE AMOR Y PAZ RECIPROCA

UNA MANO DE APOYO TOTAL

ESO ES UN AMIGO LEAL.

 

Dónde está la amistad, esa de la que tanto hablan.

Esa que sentí cuando la vida se desmoronaba.

Dónde se encuentran los buenos amigos que abrazan.

O el que junto a ti se queda y te respalda.

 

Dónde fue a parar la sensatez.

El buen andar y el buen querer.

Hay una constante escasez.

Y en vez de sentir solo buscan pretender.

 

Ya no me lo preguntaré más.

Ya nada hay por decir.

Solo observa bien a las personas.

Y ten claro a quién vas a recurrir.

 

¿Y dónde está la amistad?

Está en esos bellos recuerdos,

En esos bellos momentos ...

En las charlas interminables

Y los temas inagotables ...

En esas distancias,

que se hacen pequeñas con el eco

de tu voz.

Está en esas gritadas y mentadas de madre,

Que lejos de mentir por convivir

buscan sacar lo mejor de ti, de mí, en ambos.

Están en esas lágrimas que dicen todo

cuando no decimos nada.

Es esa comodidad que hace que riamos

por todo y lloremos por nada.

Porque para eso estamos,

Y si somos amigos ...

 

Y ¿dónde está la verdadera amistad?

Aquí y allá

A veces los menos esperados

Te sorprenden

Escuchándote dándote

Una mano cuando

Más lo necesitas.

 

¡Ella me pregunto: ¿Dónde está la amistad?

y le respondí está en ti ... está en mí

en el presente ... en el ahora

está en la gente toda

creo en la amistad que se atesora

y que perdura en el tiempo

en el día de hoy y en el otro!

 

Tuve amistades de juegos,

amigos del barrio,

tuve amigos de ocasiones Que conocí en algún lugar,

tuve amigos de escuela:

al final todos tomamos caminos diferentes.

Tengo amigos de trabajo y de redes.

Pero amigos sinceros de los que perduran en el tiempo no he tenido.

 

En un mundo podrido

donde el mal ha corroído,

ya no existe la amistad,

lo mato la maldad,

esa gran oscura vileza,

que es como la maleza,

no se erradica fácil.

Crece donde sea

y como sea.

No existe una amistad pura

ya no hay ninguna cura,

que cure esta epidemia,

que se hace pandemia.

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

HAY Y NO HAY.

Hay sombras en la luz,

y luces en las sombras,

secretos en las voces,

y amor en las trincheras,

hay odio en el amor,

verdad en el desprecio,

y hay luz en el rincón,

donde lo oscuro es dueño.

 

Hay penas verdaderas,

y de placer hay lágrimas,

y sollozos de rabia,

tan solo son rabietas.

En el valor hay miedo,

y verdad en los sueños,

y en el beso, si hay,

amor y juramento.

 

Así, siempre dos caras,

o múltiples poliedros,

hay solo una verdad,

o una, en cada hueco,

que en cada mente anida.

Cara y cruz en la vida,

y en el canto el misterio,

con faces infinitas.

 

Hay matiz en el gesto,

y en la clara mirada,

un grisáceo destello,

hay pasión en los labios,

y furia en el silencio.

Hay temor en las manos,

y amores en los dedos,

hay verdad en lo negro.

 

No hay poder más intenso,

que el núcleo de lo auténtico,

ni hay palabras vacías,

en el amor que es íntegro.

No hay cobarde más grande,

que quien al débil pisa,

ni valor más profundo,

que quien mira la vida,

en el fondo, sin prisa.

 

Hay muertos honorables,

y muertos que se hacinan,

hay verdades tan sólidas,

que aplastan y edifican,

y otras, se desmenuzan,

cual voluta en la brisa.

Hay amores que agrandan,

otros, son como briznas.

 

Así, la vida cambia,

variopinta y magnífica,

veraz y extraordinaria,

diversa, sin rendijas,

audaz y cristalina,

en su esencia distinta,

en su pureza única,

si se mira sin prisas.

 

Hay belleza en lo feo,

si el interior brilla,

y en la belleza miedo,

si el rostro se maquilla,

y hay amores tan grandes,

que ahítos de pasión,

con su poder levitan,

y con su fuerza alcanzan,

el cenit de la dicha.

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

LOS CELOS DE LA LUNA.

La luna le tiene celos

a la luz de las estrellas

y se encoge cuando ellas

acaparan todo el cielo.

 

Está la luna celosa

por no reinar en la noche

y aparenta ser Quijote

en su viaje hasta la aurora.

                            

La luna llora de pena

brillando sin lucimiento,

la luna mengua en su aliento

por ser la luz de tinieblas.

 

La luna está penitente

en su odisea marchita

y llora cuando la miran

con lágrimas de relente.

 

¡No llores blanco lucero!

Que no te pueda la envidia

de aquellos que por codicia

sólo son meros destellos.

 

La noche espera a tu imagen,

blasónate con halagos,

y es que te envidian los astros,

y es que te adoran los mares.

 

Tu lumbre no entrega sombras,

te las guardas y proteges

y tu cara transparente

de una flor es su corola.

 

Eres maga de la mente,

tu cuerpo acuna el silencio,

tienes brillo de requiebro

y siempre en cuarto creciente.

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

SI SABE, NO SABE.

No sabe el ruiseñor

que el bello canto,

que emerge,

de su exsiguo pecho,

el espíritu agranda,

y la vida embellece,

alegre cantautor,

de elaborados trinos.

 

Cuando el retoño crece,

en su crecer altivo,

va engranando las piezas,

la vida va creciendo,

pero, hay pedazos sueltos,

que rebeldes levitan,

sobre el tallo crecido,

sobre adultas cabezas.

                              

Ronronea el felino,

y se acunan los sueños,

en la extraña deriva,

que acompaña al viajero,

barrita el paquidermo,

decidiendo el momento,

y hay burbujas bailando,

y hay torcidos senderos.

 

Ya se oyen los cánticos,

son más claras las voces,

más audaz el sonido,

ya no sabe el rosal,

de su fértil belleza,

Ni el noble corazón,

que siendo ciego,

nunca niega el auxilio.

 

El tiempo se adormece,

en la apacible siesta,

la fuente es más cantora,

cuando llega la aurora,

y las voces se crecen,

cantarinas se prestan,

y en tal calidoscopio,

la vida se presenta.

 

No sabe la mirada,

que emana de los ojos,

de las pupilas prístinas,

de la mente y los órganos,

Y no sabe la mar,

del batel que la cruza,

pero su piel se eriza,

y sus entrañas tiemblan.

 

Si sabe la razón,

que la verdad se achica,

y sabe el corazón,

distinguir lo que vibra.

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri 

SI SOLO ES LA VESTIMENTA.

No hay amor más grande

que el del que ampara al más débil,

ojos que miran sin súplica,

siendo solo aprobación,

lo que pide su alma noble.

 

Y en la digna indignación,

la realidad mira cerca,

con los ojos que se velan,

ante la indigna apariencia.

Sentados en el sillón,

piensan el intenso frío,

el caminar en la ausencia,

en los placeres vencidos.

 

Se diluyen en la esencia,

en el valor se marchitan,

si por debajo se iguala,

cuando se hace tabla rasa,

entre el mejor y el peor,

así, viste la desdicha,

con las ropas de neón,

y el nervio tan solo prima,

para vestirse mejor.

 

No cabe en si la tristeza,

cuando en la dura vorágine,

donde es el ego el que reina,

nada se mira por dentro,

todo se ve desde fuera,

y así, mirando el ombligo,

a la esencia se desdeña,

la tristeza, también cuenta.

 

No cabe entrega más grande,

de quien entrega el pensar,

mirándose desde dentro,

pensándose desde fuera,

no cabe en sí mismo el verbo,

si solo la vestimenta,

pone precio a la existencia,

si es lo que se ve, la esencia.

 

Se difuminan las formas,

cuando acude el intelecto,

ignorando la apariencia,

profundizando en los modos,

viviendo lo que se sienta,

sin que se ría la audiencia,

pero, prima el espectáculo,

por encima de la ciencia.

 

Amor se escribe sin hache,

pero es del Hombre y la Hembra.

De todo lo que transcienda,

de todo ser, de la Tierra.

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri