Perfume de mujer,
fuente original de campos y verdes valles,
fragancia que enamora y despierta
los fuertes deseos que hay en mi alma,
piel que transmite aromas,
que se mezclan con la química
de los poros de mi cuerpo.
Perfume de mujer que conquista y enamora,
que despierta mis instintos y revive mi alma,
oasis donde vivo mis más hermosas aventuras,
néctar donde bebo y embriago mis más fuertes
deseos,
donde mi amor por ti se deleita y se embelece.
Perfume de mujer,
aroma fino que seduce
donde viaja mi mente a paraísos vírgenes,
donde tu olor me transporta a vivir
la intensidad de hermosos pecados,
donde me vuelvo adicto de la fragancia
de tu hermosa epidermis.
Perfume de mujer,
manantial de agua fresca y cristalina,
sudores que embriagan
y llenan de rocío mi vida,
cascada de aguas vírgenes
donde el baño calma las ansiedades de mi alma,
donde puedo refrescar mis íntimos calores
corporales,
donde te puedo beber y secar la sed eterna,
que tengo por tu piel amada.
Perfume de mujer,
mezcla de sabores que se vuelven mi alimento,
néctar dulce que se riega por la suave belleza
de tu piel,
mi manantial prohibido,
mi mágica fragancia,
la que sincroniza
y encaja una aleación perfecta,
entre los intensos deseos de nuestros aromas.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.
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