“Por un sostén las razones
Para halagarte son infinitas.
Te ves sexy si te lo pones,
Maravillosa cuando te lo quitas”.
Quítatelo y déjalas al descubierto,
Igual no necesito verlas para saber que es cierto,
Que son dos rosas en el jardín de tu pecho.
Cuando muy femenina te animas a mostrarlas,
Ya no aguantaré mis ganas a besarlas
Como nunca antes lo había hecho.
Quítatelo y permíteme soñar
Que hay en tu cuerpo para mí un manjar
Listo para estar en mi boca …
Déjame saber ya sin ninguna duda
Que estar conmigo así desnuda
Es en realidad lo que más te provoca.
Perdona si me ves así, impaciente,
Se me antoja acariciarlas, besarlas dulcemente
Y hacerles saber que son muy bellas.
Creo que aunque ha habido distancias
De lo acentuado de mis ansias
Es algo que ya saben ellas.
Siendo sincero tengo mis razones
Para creer que tus pezones
De ningún modo se quedan atrás en hermosura.
A mi lengua le van a saber a gloria
Y hará que valga la pena contigo
Una romántica historia
Y no una simple aventura.
Quítatelo y mira cómo me siento,
El dueño de las bellezas
Que son el sueño
De cualquier hombre que te desee ...
Mira cómo son las cosas,
La vida nos pone a veces ante cosas tan hermosas
Que uno ni se lo cree.
Puedo pensar que estoy soñando y te diviertes,
Porque mi fantasía en una realidad conviertes
Y sabes que no olvidaré estos hechos.
Como río indetenible haces que provoque
Qué río al fin deseoso de ti
Desemboque en el océano ardiente de tus pechos.
Quítatelo, tanto tiempo por eso he esperado,
Y dame tus besos que ya echo de menos …
Te amo y me rindo ante tu belleza, ya ves …
Te prometo que por cada beso que me des
Yo les daré diez más a tus senos.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri