ah de cantar, en cítaras de felicidad...
El cóndor que en libertad emprende vuelo
y oprimido cae postrado ante el alabastro vibrátil...
que sin bronca y temor...
se yergue nuevamente al celaje de grana y zafiro...
El sol que madruga en todos los matinales,
sin descanso y frustrado...
su tristeza se refleja en el leteo taciturno...
añorando iluminar la cobriza de la oscuridad...
El cuervo moribundo que acecha sin cesar...
necio de amor e infecto de odio,
en tules blancos morirá...
El rico de larvas se alimentará
y el pobre imperante vencerá...
el rico pobre en su ambición se destruirá...
mas el pobre rico de arcanas gozará...
El ladrón de perdón rogará
mas el político de huir se desesperará,
y en deslíe caerá...
El religioso de fe vivirá
y el Satán de odio matará...
mas la fe en pendáculos florecerá
y el odio en fango arderá...
Autor
Antonio Carlos Izaguerri
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