¡Oh, corazón malo!, y que siente el dolor,
porque morir de amor fue con pesadez,
cuando en el alma y un gran frío en mi tez,
con sufrir y con pena de un buen amor,
y en mi testa un calambre por gran pensar,
sentir una ilusión en mi caminar,
y como es la fuerza al miedo de callar,
porque morir de amor es sólo esperar…,
y por un tiempo en que el sol llegue a alumbrar,
y salir en el cielo por gran volar,
y en una incertidumbre al suelo llegar,
y morir de amor es ser y recordar,
y el suceso ocurrido se fue a morar,
y con olvido porque pude olvidar…
Autor
Antonio Carlos Izaguerri
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