Hay unos ojitos hermosos
Que no dejo de pensar
Como dos lindos luceros
Que no dejan de brillar.
Como zafiros preciosos
Tus ojitos tan hermosos
Brillantes y majestuosos
Las puertas del cosmos.
Destellas tanta belleza
De tu mirada de nobleza
Que me cautiva y enamora
Que me fascina y sonroja.
Me envuelven en suspiros
En una aurora de ilusión
Me impregnan de sueños
Y dan fuerza a mi corazón.
Alumbran mi alma
De la penumbra me salvan
Arden como Hefesto,
Cristalinos como agua
Son tormento y fina calma.
Puedes ver la ternura en ellos
Y sentir los besos de sus parpadeos
Puedes sentir tu pecho latir
Y desear en ellos mil vidas morir.
Son tan hermosos y siempre los adoro
Son la luna de plata y el sol de oro
Son la más bella inspiración
Tus ojitos lindos, mirada de amor.
Y cuando se une tu mirada
Y tú divina sonrisa
Eres razón justa de vida
La más perfecta poesía.
Amo tanto tus ojos amada mía
Los ojitos hermosos de mi niña linda
Quien siempre ha sido y será poesía
Mirna, Mirna el dulce amor de mi vida.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri
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