Dos caras tiene la Luna, solo dos
una se esconde perdida entre las sombras,
y los amantes copiando ese extravío
apagarán las farolas.
Porque su amor es prohibido, prohibido es
y se aman en tanto al tiempo roban horas,
dos, solo dos prometiéndose al partir,
que encenderán las farolas.
Y volverán los amantes, volverán
ellos dos, juntos los dos y en una alcoba
se amarán y nuevamente se amarán
ya sin luz de las farolas.
Se despiden los amantes con un beso
su tiempo dejó de ser color de rosa,
y a dos caminos que oscuros se bifurcan.
¡Los unirán las farolas!
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.
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