se esconden los enigmas
del universo que iluminas,
un reflejo dos misterios
que poseen dos destellos,
el sentir en mí esa calma
que tú le das a mi alma,
el despertar con el sol
y la belleza de un girasol
veo tu cuerpo en mi cama.
El anhelo de mi vida,
el motivo para amarte,
con pasión desbordante,
tu figura que me cautiva
hace sentir mi alma viva
en tu mirada descubrí yo
el faro que es mi refugio
un remanso en tu ternura
al abrazarme a tu cintura,
estar sin ti es un suplicio.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.
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