Con rayito de Luna;
te escribiré versos para ti mujer,
y cada vez que los leas
en un suspiro te acuerdes de mí.
en ese gran amor, que los dimos
en esa tarde de ternura,
o en la amanecer de playa
donde los amamos con loca pasión.
También escribiré prosas;
cuando me caliente el sol,
porque él me dará la inspiración.
y te llegue a tu teléfono;
sentirá en tu corazón que me amaste,
con locura con tu ardiente corazón.
Asimismo te escribiré una novela
que hablará de pasión, de los dos,
de los momentos que fueron
del color que le diste a mi vida.
A LA LUZ DE LA LUNA...
LLORA UNA GUITARRA,
COMO RIMA ESTELADA...
SE DESHACE EN SU MIRADA,
ENTRE ÁLAMOS CANTORES...
PÁLIDOS RUISEÑORES,
HERIDOS DE NOSTALGIA...
EN LA BOCA...
EN QUE SE ALZAN.
Rayo de luna que se divisa a lo lejos
que iluminas nuestros sueños
y eres testigo de este grande amor
no dejes que bajo tu mirada se empañe
el sentimiento que ha surgido entre dos personas
aun con el paso del tiempo.
Debajo de esta noche llena de estrellas
me parece que podría amarte toda la eternidad
con el susurro del viento trayendo tu nombre
y esta tierra que solo a tu lado se ha vuelto bella
con la caricia de una flor que he de darte
en obsequio de mi corazón y mi alma entera.
Rayo de luna que observas esta debilidad que tengo
la que es provocada por el palpitar de mi amor
la prueba de este cuento con final incierto
tú sabes muy bien cuan profundo he amado
y cuan intenso he de llegar a amar
para dar significado a mis días.
En medio del silencio te contaré unos versos
te diré que no hay nadie más que me fascine como tú,
como el calor de tus besos y de tus palabras
como los luceros que están en tus pupilas
y las fantasías que me brindas al andar
en medio de memorias que siempre he de conservar.
Rayo de luna que iluminas el horizonte,
jamás me dejes caer de este sueño
no permitas que se desvanezcan mis ilusiones
porque bien sabes que este amor es lo único que tengo
la esperanza más grande que me sostiene
mis anhelos y deseos para el porvenir.
Así de manera dulce, te repetiré cuanto te quiero
sabrás por mi boca que eres mi mayor tesoro
una luz inocente en medio de mi sendero
aquello que no expreso desde el fondo de mi ser
canciones que se mecen afuera con el sonido del viento
y un juramento que ha de durar para siempre.
Eres cual rayo de luna
Penetrando en mi ventana,
Con amor, entre la calma
De esa luz con que me adula;
Luz plateada que conjuga
Sutil esencia de esa alma
Con el calor de la llama
En que mi amor se consuma;
Eres luna esplendorosa
Llena de vida y de luz;
Eres del cielo, ese soma,
Emanando del azul;
Ese amor que apasiona,
Lo has encarnado tú…
DOLIENTES
SONES DERRAMADOS...
EN EL REPOSO
DEL SILENCIO
DEL QUE NACEN.
Aunque la distancia no me permite
En la noche oscura al borde de la laguna
Te escribiré con un rayito de Luna
Las ansiedades y el dolor de amarte.
y si un día quieras dejarme
con ése mismo rayito de Luna
Escribiré un poema triste como ninguna
y nunca podrás olvidarme.
Rayo de luna, rayo de luz
Que inunda los días de mi caminar
Rayo de luna, que entra por las pupilas
Hasta llegar al corazón
Ese que tu dejaste medio herido
Antes de marchar
Rayo de luna, que ilumina tu caminar
En tu fría y áspera aventura
Rayo de luna, tratando de encontrar
En tu bella mirada
En cada despertar
Como rayito de luna llegas
sonrojado al horizonte vienes,
no es el viento quien te trae
eres tú, que en viento llegas.
Con ternura abrazas miradas
y con tu voz unes corazones;
son tus rayitos de luna
los que ahora dictan estos versos.
Rayito de luna, mi dulce algodón,
en tus brazos quiero vivir
porque contigo aprendí a amar.
Como rayo de luna
iluminas con tu mirar
mis madrugadas
le das luz a mis noches
y como luz de luna
haces de este amor
un derroche de pasión.
Un rayo de luna necesito amada mía
para subir al cielo y tenerte a mi lado,
dame esa luz que preciso,
pues sin ti, amor yo no vivo.
Necesito un rayo dorado
que me dé el empuje de poder volar hasta
donde estás, amor amado.
Como rayo de luna
entraré por tu ventana,
tocaré tu rostro
te amare en silencio
besare tus labios
cual luz de luna
me quedare a tu lado
hasta que el sol nos despierte
y mi luz se haya agotado
Enamorada de la Luna
Si pudiera, frente a la luna
correr las agujas del reloj del tiempo,
cerraría los ojos para contemplar tu paso,
mientras las estrellas abren el camino
para llegar al paraíso.
A mi ventana asomado
cuando el ocaso despertaba,
observé como llegaba
de la luna desgajado,
ese rayo de luna esperado
que a tu amor este me unía;
¡Dios que grata compañía
para cualquier enamorado!
Con el rayo de luna
despojada de cualquier osadía,
tu mirada se volvió sobre la mía
Y la luna se hizo cómplice
nuevamente de nuestro amor furtivo...
Recitan los lobos de montaña
A la luna lejana amada y brillante
Y quizá en su lamento un amor imposible
Oscura pasión de fieras salvajes
Duerme tranquila mujer mía.
Entre los rayos de luna observo
La tranquila estancia de tus pechos
Único bálsamo a mis inquietos sueños
Nada es igual después de amarte
Anda tranquila entre los brazos de morfeo
Duermo hasta despertar
con tu suspiro,
Brisa de aliento corazón
que me llama torbellino de abrazos
Pero mi esperanza
muere con tu silencio.
Eh, soy de nieve.
Lluvia en invierno.
Te tendré siempre en la mente
como mi mayor fortuna,
fortuna de amarme siempre,
como tus labios de espuma.
Haz resultado cual fuente
que ha bañado mis enojos
contemplo tus bellos ojos
que irradian como luna.
Y así, con el alma desnuda,
inventaré mil lamentos;
beberé la fortuna de tenerte un momento.
serás mi historia, jamás un breve cuento...
Mi cielo...mi universo; apresaré tu fulgor,
con un rayo de luna.
Ven... acerca tu luz a mi alcoba,
sé calor en esta oscuridad... sé mi fortuna.
Luz de luna que iluminas mi existir
no me dejes nunca,
pues sin ti yo dejaría de vivir,
mantente conmigo luna
mientras termina mi noche,
cual rayo de luna azul
cúbreme luna con tu manto de tul
permanece junto a mí
como rayo de luna azul
permanece vida mía
y date cuenta cuánto te quiero.
Soy Luna,
manto sin luz,
pero tu corazón
es mi añoranza
rayo de estrellas
nacimos para amarnos.
La luna se queja porque no estas,
sus rayitos buscan desesperadamente
saber dónde estás, y yo le dije:
«Ella no es algo que se busca,
porque ella está en todas partes
y si no me crees,
dialoga con tu encéfalo y que te lo cuente él»
Cual rayito de luna llena
que se levanta en el horizonte
en un día de verano
que se encuentra con el sol
y él al ilumina toda
así es tu amor y el mío
que con solo tu mirada
iluminas mi destino.
Una sonrisa tierna,
la mirada como un rayito de luna,
una canción de amor fuera de tu época,
latidos anunciando la llegada de la primavera.
Un pensamiento recordando otoño.
Así de poética, como la luz
de la luna, la vida.
Y más, cuando llega la voz
de tu madre al oído.
"Dios de la bendición hija mía"
quise tirarle piedras a la luna
tratando de bajar algún tesoro místico
joven iluso con hambre de fortuna
como todo aquel que en el mundo es típico
la magia de la luna no ocupa de exigencias
mas siempre el ser humano despertando conciencia
sabe que este astro vivifica oportuna
moviendo las mareas con rayo de la luna.
Con rayo de luna
Bajo el borde de un sueño
Ajeno al poder de tu luz
Me duelen los ojos de mirarte
En el silencio helado de tu lumbre
Te ciernes repentina en mi suspirar
En una sucesión despiadada de fases
Que me hacen quererte y odiarte
En esas mismas fases de igual magnitud.
Siempre te recordaré por lo difícil que eres de conseguir,
pequeña luz que se cuela por los orificios de mi ventana,
vivo añorando cada noche.
Luna del romance y del despecho
del caminante dormido en sus ilusiones
rayos de luna que caen y se difunden
bañando de luz mis cincelados sueños.
Rayo de luna, blanco mensajero,
Dile al oído, con voz de murmullo,
Entre el silencio y como un arrullo,
Que solamente yo. a ella, la quiero;
Hilo de plata que vuelas ligero,
Llega en silencio hasta ese capullo,
Dile que nuestro amor será mi orgullo,
Brota de un corazón, siempre sincero;
Dile que sueño mágica alegría,
El tenerla en mis brazos con ternura
Y el decirle al oído serás mía
Y el de besar su cuerpo con locura;
Y envueltos en inmortal melodía
Hacer realidad loca aventura…
Autor
Antonio Carlos Izaguerri