Tras una noche mágica y estelar,
siento que no quiero despertar
porque de mis sueños no te quiero apartar.
Pero si pienso detenidamente y con cautela
¡Qué importa, dejarlos llevar!
Me quedo con la vibración de tus palabras
que son un preámbulo para hacer el amor
Un amor, que yo llamo verbal.
Porque tus palabras me acarician
y tus frases me penetran,
tocando el límite y las profundidades, de mi
más preciada oscuridad,
transformándose, en el más puro de los
orgasmos,
generando destellos de luz, éxtasis y un
desenfreno brutal
alineando mi centro y el camino hacia mi
espiritualidad.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.
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