martes, 1 de septiembre de 2020

EL CAMPESINO.

Campesino de machete, pala, pico y azadón

De jornadas extenuantes y humilde de corazón

De cuentos y leyendas, que amena la conversación

De sudores y manos callosas, dolores de consideración

Fuerte y aguerrido, digno de admiración

Cultivar la tierra, la convicción de su educación

Trata sus labranzas con cuidado y amor, de campesino su profesión

Sus cultivos son el alimento divino, de Dios, su bendición.

 

Tierras hermosas, de su espléndida naturaleza

Que el campesino la labra y de ella hace el manantial de su riqueza

Con machete se abre paso entre la selva, que se recubre de maleza

Con el arado y su rastrillo, remueve la tierra para su limpieza

Cuida el riachuelo cristalino y de los árboles su corteza

Sus herramientas las maneja con profesionalismo y destreza

Reina el amor en su hogar, con esposa e hijos a pesar de su insuficiencia

 

Dura faena de abonos, fumigaciones, el cansancio de sus jornales

Perros y gallinas, marranos y aves, el cultivo de sus animales

Sin médico, ni medicinas, la caridad lo lleva a los hospitales

El campo lo llama y lo necesita, de sus ruegos espirituales

Las inclemencias y las enfermedades lo azotan alrededor de sus matorrales

Los inviernos y crecientes, arrasan sus cultivos sin ayudas gubernamentales

Los veranos intensos secan la tierra y los soles ardientes son infernales

Nunca pierde la fe, ni la humildad, ni su cultura, ni sus modales

Siempre le pide a Dios, que proteja a su familia, de las tormentas terrenales

 

Con esfuerzo y dedicación, saca sus cultivos a vender a pueblos y ciudades

Alimento primordial para los citadinos, en medio de sus comodidades

Pero se encuentra con avivatos, que se aprovechan de sus necesidades

Le roban su sudor y sus manos callosas, el llanto de sus felicidades

Se amparan en su inocencia y lo atracan, acrecentando sus dificultades

Les pagan a precios irrisorios sus productos, con el visto bueno de las autoridades.

 

No existe amor por la tierra, por el campesino y sus labranzas

Sólo existe corrupción y maldad, que arremeten caos, miedos y anulan sus esperanzas

Campesino orgulloso de su querida y amada tierra, de bendiciones y confianzas

El futuro de la humanidad está en el campo y del campesino sus enseñanzas.

 

 

 

 

 

Autor

Antonio Carlos Izaguerri.

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