lunes, 27 de abril de 2020

ACUÉRDATE DE MÍ.

Acuérdate de mí, en tu noche,
cuando callen las cigarras
y la sangre serene
los latidos de tu pecho.

Búscame en tu almohada
y en el dedo invisible
que llega y acaricia tu cara.

Estaré unido a tus sueños
en una transfusión de sonrisas
y de versos.

Acuérdate de mí, en tu noche,
cuando los suspiros te embriaguen
y aceleren los sentidos
el tic-tac de las pasiones.

Deja que te diga lo que siento,
que te hable en un susurro,
que te cante, como hacían los gorriones,
y recite los poemas,
que nacieron bajo un roble.

Acuérdate de mí, en tu noche,
hasta que llegue la alborada
y nos deje la tibiez de sus caricias.

Porque el día llegará con otros sueños,
y nuevas realidades,
dando paso al rocío de la noche
y al sudor de nuestras almas,
embriagadas, y contentas,
por el día que comienza.

Acuérdate de mí, en tu noche
y siente el litoral, con la resaca,
de la playa que susurra,
de la estrella que te mira
y del niño que te llama por tu nombre.

Acuérdate de mí, y no me olvides.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri. 

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