jueves, 2 de abril de 2020

EN EL CENTRO DE TU ALMA.

Mariposita, ¿por qué siendo volátil,
te aprisionas en la compañía
de la soledad?, mariposa linda,
tienes libertad, eres tan ligera,
pero al mismo tiempo un tanto deleznable;
la exaltación de tu alma no está
en el frenesí impulsivo
de entidades encendidas,
está en tu alma, incinerada
en la ansiedad de ser habitada,
deseo inherente a tu origen transcendental,
no es bajo tu saya donde se halla
tu valía, es en el centro de tu alma.

El amor es tan espiritual,
que se puede amar
aún cuando esté ausente
el ser amado, se le ama
en la distancia insospechable
que acerca a las dos almas.

Fueron tus retóricas que nacieron,
en los tétricos trances ...
pero conforman un himno hermoso
que los reveses de la añoranza
se trasforman en progresos alegres
de eterna esperanza.

En tu tálamo déjame acostarme
desde el alba al ocaso ... que presiento
que en tus sueños creo sabrosuras
con tu arte en el valle de mi soledad.

Tú y tu filosofía atrevida,
y tu espiritualidad además ...
en vez de hacerme mal,
siempre me hace tanto bien.

Etérea eres, porque con destreza,
te introduces en cada ávida alma
que afana y espera con mansedumbre,
hallar en tus cánticos sublime sosiego ...



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

No hay comentarios:

Publicar un comentario