Eres alma de mi alma,
amor de mi amor,
eres noche y madrugada,
eres frío y calor.
Eres agua que brota,
que riega mi corazón,
eres de la música la nota
que me aligera el dolor.
A tu lado he viajado,
he reído y llorado,
he sentido que mi vida
ha sido lo mejor soñado.
Alas llenas de esperanza,
fuerza de mi corazón,
eres de mi vida la calma
que me quema la razón.
A tu lado fui flor y mariposa,
fui primavera y olor,
fui la nube viajera
que conoció el amor.
Fui un cielo estrellado,
luna llena de calor,
fui una sinfonía
que destilaba pasión.
A tu lado fui luz y maravilla,
sentí como mi sangre corría,
como ella palpitaba
gozando todo lo que vivía.
Eres aire de mi vida,
música de mi corazón,
eres el recuerdo vivo
de que pude conocer el amor.
Eres suspiro y alivio,
claridad de mi inspiración,
eres el dulce remanso
que nace de mi ilusión.
Y mis versos no callan,
tampoco mi corazón,
serán siempre la calma,
sentado en mi rincón.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.
No hay comentarios:
Publicar un comentario