De la mansedumbre ora certera,
Se postra el vivir en cómodo aliento,
Ora es ayer la ilusión postrera,
Ora obra envilecida de otro tiempo.
Pulpitos de un templo en la cumbre fría,
Grietas de un mural en el propio templo…
Vencida la fe, gris monotonía.
Las aves del luto siguen el ejemplo.
El cuervo de Poe sigue destemplando
La voz del poeta, muriendo desecho…
En la gruta amable y el verbo imperando,
Mientras la rutina espera en el lecho.
Viva la palabra, díscola y ardiente…
La amada… que murió en la hoguera,
El inquisidor…anula al valiente,
Homero clamó desde la ceguera.
Detén al olvido
¡Siempre afán poeta!...
¡Narra lo vivido!.
Si, si poeta ruge muy fuerte
saca sentimientos y pensamientos
que broten en cascada por fuera y por dentro,
que ni el viento haga callar los rugidos
que salen intensos, como un mar enfurecido.
Poeta, es tu emblema
el verso y tu elixir;
poeta, no hay poema
se hacen al escribir.
Tus sueños, mariposas
que vuelan en el jardín
y son premisas las rosas
que renacen por el sinfín.
Tu aprecio es un terso
oculto en las prosas
que son siempre hermosas
en todo el universo.
Poeta, no hay delito
con la sabia y el honor,
poeta, no hay escritos
si no se escriben con amor.
Ser poeta es la virtud de decir
verdad con rimas,
es entregar el corazón en letras,
denunciar las miserias en versos.
El poeta canta y llora en su poesía,
Grita y calma con palabras.
El poeta enamora y cautiva.
El poeta debe ser profundo en su creación,
y clamar por los pobres de la tierra.
¡Ruge poeta en cada canto!
Ruge poeta porque en la jungla espesa
De anhelos y desdenes que en la vida se cruzan
Hallarás escondida dormitando entre nubes
Decorando la noche con sus ojos azules
El hada que en la pluma se dibuje en belleza
La piel de terciopelo de la mística musa.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri