Somos una fábrica de sentimientos,
hacemos chalecos antibalas
que son escudos de amor y paz
para proteger el alma
fabricamos varios modelos de alegrías
para las personas agobiadas
y para los pobres, grandes castillos de fantasía
y para el que pasa hambre,
fabricamos pan para el enfermo dosis de esperanza
muletas de cariño para el que no puede andar
hasta fabricamos sueños, metidos en urnas de cristal,
somos una fábrica de sentimientos
que en bolsa no nos dejan cotizar
pero que vivimos siempre contentos
y si lloramos, unos a otros nos consolamos
y trabajamos en jornadas intensivas
y para colmo no cobramos nada
bueno si cobramos,
la sastifación que nos da
sembramos en el corazón la libertad
y hasta hacemos horas extras, si algo sale mal
somos una fuente inagotable
para el que quiera beber
si bebe el agua clara, nunca volverá a tener sed
para los niños fabricamos juguetes
para los abuelos caballos de cartón
para las mozas ramilletes de azucenas
para las madres besos de espuma y calor
somos una fábrica de sentimientos
cuya sede está en el corazón...
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.