Caminos y más caminos
que a algún lugar nos llevarán
con un hermoso amor
o en completa soledad
lo importante es
de la vida disfrutar
aunque se encuentren piedras
que nos hagan tropezar.
Caminos con espinas
de lágrimas en las mejillas
de sombras y oscuro cielo
donde se pierde el anhelo
o quizás con la esperanza
que en el fondo se guarda
se logre la templanza
y de nuevo el amor arda.
Caminos con luceros
que alumbran el sendero
mostrando el horizonte
con brisa para un remonte
que te suba a las estrellas
y que sientas cosas bellas
sintiendo plena paz
haciendo a el alma vivaz.
Caminos oscuros, caminos claros
es lo que nos da la vida
debemos saber manejarlos
aunque se tengan caídas
pero mejor, si todo camina
y nada se arruina
dejando fluir la vida
y que sea colorida.
Caminos de esperanza
de abrigar el alma
de soñar despiertos
encontrando ese consuelo
que da el amar, que da el cielo
que dan las flores…
Porque sigo
en la vida creyendo.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri