Tú mujer; eres mi linda flor,
de mi humilde casita,
la que adorna mi hermoso jardín.
Qué bonito es despertar cada mañana junto a
ti,
y cuando regreso de mi trabajo,
cómo me
pongo de contento,
porque eres la que me recibe en casa feliz,
llena
de amor,
y eso es genial entre usted y yo,
porque nuestro amor día a día
es una bendición de Dios.
Eres la flor más linda
y hermosa Rosa
en mi jardín estas y estarás.
Floreciendo y dado ese aroma
de querencias interminables.
Eres mujer helena ¡tan bella!
Del sugestivo atractivo permanente
Prefijo del aire eterno, luz de doncella,
Celestinos ojos con brillo inocente.
Iris del refulgente calor de la centella
Ocultabas tu dudosa alma aparente
En un corazón bermellón que destella
Esa maligna y oscura veta transparente,
Marisma de riesgo, resbaladiza la huella.
Susurros y suspenso del Areópago en dilema
Medrosos los jueces de Friné,
la de Praxíteles,
...Que apenas fue salva del pérfido anatema:
¿Mala y bella? ¡Belleza perdona a sus fieles!
Mujer: palabra dulce de encanto y ternura,
de amor y de entrega, también de dulzura.
Soberbia se pone cuando ella se enfada,
pero a todos protege con manos de hadas.
Puede ser obrera, maestra, doctora,
envuelve su obra con la miel de abeja,
si es madre no tiene descanso, y
nunca se queja,
lleva en sus labios una gran sonrisa,
la mujer es linda, por fuera y por dentro,
sea joven o añeja.
Eres la linda flor de mi jardín,
Y llegaste un otoño
Retoño de engendrado mi rama. ya partida
Unida a quien puso la semilla de tu fecundación
Te añoro y extraño tu sonrisa, mi Ángel
Tú eres mi linda flor
Que adorna mi casita,
Que en mi jardín habita
Y lo llena de amor;
Despierto con su olor
En mi tibia camita
Y mi pecho palpita
Al mirar su candor;
Al terminar el día,
Regreso cansado,
Ella es esa armonía,
Ese aliento sagrado,
Esa viva alegría
De vivir a tu lado…
Eres mi flor linda,
la que vive junto a mí,
la que riego con mis caricias
cuando la tarde empieza a salir,
para que cada pétalo se mantenga vivo
y puedas por las noches darme calor,
Eres mi flor linda,
la mujer que vive en mí,
en mis recuerdos de la mañana
y en los días de soledad
cuando la lluvia cae a cantaros
y no te tengo aquí
para que alivies con tus caricias y palabras
el estado de mi jardín,
como la rosa que más se preocupa,
la que más sabe de mi sentir.
Cómo refinado jazmín, brota,
desde tu blanca piel,
el perfume exquisito, que,
inunda en placer mis marinas,
provocándome tomar de ti
cada pétalo, que despierte en mí
ese desbordado placer de poseerte.
Eres mi flor linda
Que resplandece con
La luna llena
Tu aroma es suave e Infinita...
Tu tallo grueso
Se resguarda con espinas
Y cuando cae el rocío
Tu belleza se intensifica.
Juré participar todas las veces
que me invitan a escribir algún poema
que haré no importa si el que pide
que yo escribiera sobre un tema
que se llame o no se llame porque sí.
En este caso el poema de este nombre
me parece un poco extraño para mí,
no puedo llamar a este muchacho
que sea mi flor linda alguna vez.
Con todo, voy a escribirlo y no me importa,
aunque cueste entender esta poesía
que hablar quiere pedir a alguna chica
que sea linda y buena como flor
perfumada y agradable como todas
las chicas que visitan su jardín.
Qué tal si en lugar de pensar
sobre una mina, me inspiro
tomando sin sentido
de solo pensar que me gustás
aunque seas buen mozo
y bien fornido
en lugar de ser linda perfumada.
Y así quedará en la eternidad.
Has hecho florecer mi corazón,
eres la simiente de mi pequeña flor,
corazones que florecen entre los paramos.
Eres mi linda flor que brota entre las nieves,
flores que prenden entre los corazones que
arden,
nieves que se derriten con la pasión del amor,
flores entre las nieves que resplandecen,
amor que mana de mi pequeña flor .
Amor imparable entre flores.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri