Siempre serás
mía,
A un cuando
encuentres a alguien más en tu camino.
Serás mía en
la distancia y en el tiempo,
En la nada y
en el silencio.
Serás mía …
siempre.
Serás mía
aunque te alejes más.
Serás mía
cuando camine junto al mar.
Serás mía
cuando camine con la lluvia.
Serás mía
cuando de pronto me encuentres
Y una lágrima
parezca no salir.
Serás mía
cuando alguien me hable de ti.
Cuando piense
en ti serás mía.
Serás mía
cuando llegue invierno.
Serás mía
cuando la primavera esté por llegar.
Serás mía
cuando la llegada de un bebé
Sea anunciada.
Serás mía
cuando nadie hable de ti.
Serás mía
cuando termine la tormenta.
Serás mía
cuando aparezca el arcoíris ...
Serás mía …
Serás mía porque
un día me lo dijiste
Y sé quedó en
mi corazón.
Serás mía
cuando la distancia se robe en tu presencia,
Y en el camino
con tus recuerdos serás mía.
Serás mía
cuando parezca escuchar
La voz de un ángel
Que ilumina la
oscuridad.
Serás mía
hasta el último susurro,
Porque quizás
nunca te olvide.
Serás mía
cuando un adiós sea dicho.
Serás mío
cuando llegue el amor de nuevo.
Serás mía
cuando el sol acaricie tu rostro.
Serás mía
cuando una estrella baje del cielo buscando tus manos.
Serás mía
siempre,
Porque tuya es
mi corazón,
Por eso … serás
mía, siempre mía.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri