domingo, 5 de abril de 2020

EL PASO DEL TIEMPO.


El paso del tiempo entremezclado en tu pelo
es el tiempo que, al sol, beso tus lados oscuros.

El paso del tiempo acariciando tu pelo
es el tiempo que gozo imaginando la brisa de tus brazos.
               
El paso del tiempo alienado en tu pelo
trae, en el tiempo, caricias, sonrisas y besos.

El paso del tiempo enraizado en tu pelo
es el tiempo estar en casa
acomplejado de hogar ...




Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

ME ENAMORA.


Me enamoraron, tus lindos ojos, las ventanas a tu alma
Esos ojos tan llenos de amor, que a mis ojos enamoraron
Me enamoro, esa sonrisa, tan hermosa, que no olvido
Esa linda voz, que, al escucharla, hace que me emocione, por ti.

Me enamora, recordarte todas las noches, en mis pensamientos
Recordarte me llena de esperanza, de un día verte de nuevo
Me enamore, de esa niña tan dulce, no podría explicar, porque me enamore de ti
Pongo mi corazón en tus manos, Nadia por favor acéptalo con cariño.

Me enamora, saber que tu estas siempre en mi mente
Olvidarte no podre jamás, tu estas en mi mente
Como explicarte, lo que siento por ti
Déjame entrar en tu vida y tratarte de explicarte, lo que siento por ti.

Me enamora, sonarte todas las noches
Quisiera que en tus sueños me lleves, para no volver
Y poder despertar en tus brazos, y ver tus lindos ojos
Una vez tu y yo juntos, poder probar la miel de tus labios.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

¿QUÉ ES EL AMOR?


¿Qué es el amor?, ¿tú lo sabes?
es ficción o realidad
es algo etéreo, es volátil
es mentira o es verdad.

Es efímero o eterno
dicen que viene y se va
inefable en su contexto
sibilino sin piedad.

Complejo y contradictorio
nos hace sentir tan vivos
que a veces te pone alas
y crees volar sin destino.

A veces inspiración
casi siempre sentimiento
unas veces emoción
otras puro sufrimiento.

Dime tú sí has encontrado
felicidad o pasión
o todo ha sido desdicha
y al final desilusión.




Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

SE ACERCA Y SE ALEJA ...


Que lejos quedan los sueños,
que cerca la realidad,
que lejos aquellos juegos,
que se van difuminando.
Cuan próximos los espejos,
que revelan la verdad.        
Sigue el jilguero cantando,
cuando amaina el temporal.

Las voces quedan flotando,
en la etérea inmensidad
y en sus ecos se repiten,
palabras que hacen dudar.
Que lejos se van quedando,
los matices y los gestos,
que cercanos son los besos,
que nacen de la verdad.

Que lejano queda el tiempo,
donde era un placer pensar.
En lontananza quedaron,
ilusiones y deseos,
pero otros nuevos nacieron,
de una nueva realidad.
Algunos se fueron yendo,
otros del vientre nacieron.

Sonidos que se quedaron,
grabados a fuego lento,
en las fisuras que quedan,
entre nobles sentimientos,
cincelados en la historia,
con manos de puro acero,
guardados en la memoria,
como reliquias de tiempo.

El verso quedo atrapado,
entre lo arcano y lo cierto
y las estrofas soñaron,
con descubrir nuevos tiempos.
La rima en los recovecos,
vive abrazada a lo viejo
y las letras se apasionan,
creando nuevos conceptos.

Que atrás suspiros y aromas,
que tanto amor construyeron,
como se acerca otro amor,
que de puntillas se asoma.
Una necia pesadilla,
que muere al nacer el día.
Los ojos que recorrieron,
bellas formas que respiran.

La luz se acerca curiosa,
a la sombra que palpita
y desgarrando sus ropas,
abre la vida por dentro.
Que no se alejen las risas,
que llenan los tristes huecos.
Que se acerquen las caricias,
con manos de terciopelo.

Todo se aleja y se acerca,
pero se queda la esencia,
que vive en el sentimiento.


Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

LA NOCHE ES JOVEN.


La noche es joven
Y sin embargo
Tiene tantas arrugas,
Por cada una bajan
Mis periódicas tristezas,
Mis llorosas nostalgias,
Mi traumante silencio.
No estás aquí
Y parece vacío el tiempo,
Mi gozo se trastorna,
Mi calma se erosiona,
Como sin condimentos
Y ceno solo lamentos,
Se enciende mi carácter,
Mi paciencia es suicida,
Pero lo peor de todo
Es que me siento culpable,
Culpable de no verte,
De tanto descuidarte,
De clavarte el puñal de la ausencia
Que te provoca herida
Que mana lágrimas y sangre.
Pero llegas y brillan las estrellas,
La luna se enciende,
La noche es un trajín
De caricias cruzadas
De verbos centelleantes,
De amor inquebrantable.
Por eso hoy te extraño
Aunque la noche es joven
Y todavía espero el milagro
De volver a mirarte.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

RECUÉRDAME.


Con el aspecto de una flor recién despierta
se escurren fugaces las horas, los minutos,
los segundos, las caricias de principio
a fin, como el recuerdo de ese último abrazo.
Entre un abril y cerrar de ojos,
aparecieron las anunciadas gaviotas,
encontrándose de suerte la tierra de los náufragos,
sollozando con la soledad del nuevo tiempo,
aprendiendo del amor, desde cerca pero lejos.
Confinada la vida, en libertad el pensamiento,
arrestado el camino, el arte alzando vuelo,
lo que un día estaba perdido,
hoy se encuentra descubierto.
Volverán a pasar los años, los meses, los días,
las horas, las historias, el llanto y las sonrisas,
en este viaje con puntos suspensivos,
y recordaremos que la flor despierta
también dormirá para jamás volver a ser vista.
Por eso, recuérdame, no olvides que te abrazo.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

GLOSA AL ARCANO TIEMPO.


Arcano con gran misterio
han dado en llamarte viejo,
no son más tus reflejos
que llevas al cementerio,
con humor o muy en serio
no se sienta usted aludido,
cuando todo está cumplido
revisa colmillos, no dientes,
en caso de algo pendiente
al tiempo, tiempo le pido.
                                       
Al tiempo, tiempo le pido
como quien pide la pausa,
sin mucha prisa por la causa
para un gazapo o descuido,
sin alarde de mayor ruido
esperando la oportunidad,
a tan muy relativa edad
por mejores derroteros,
y sin tanto desespero
el tiempo, tiempo me da.

El tiempo, tiempo me da
en muy ajustado horario,
y sin fecha del calendario
todo esto no es novedad
con trecho de caducidad
y clima que Dios bendice
a todo el que contradice
albricias y buen augurio
en rol de terrenal Mercurio
y el tiempo mismo me dice

Y el tiempo mismo me dice
déjate la demasiada ilusión,
que tendrá poca duración
el verbo de quien desdice,
para profetas que predicen
el curso de los días les dará
calendas que marcarán
distancia con el desencanto
la elegía es triste canto
que él me desengañará.




Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

UNA PREGUNTA IMPOSIBLE DE CONTESTAR.


Ando buscando respuestas
y parecen que se esconden
las busqué bajo las piedras
y en el color de las flores,
no contestan las estrellas
porque las calla la noche
y amanece entre tinieblas,
es oscuro mi horizonte.

Cómo podré yo saber
aquello que nadie sabe
y por tal es mi interés
tener respuesta a mi alcance,
todo se va en suponer
y nadie gana el debate
pues ni la misma mujer
sabe lo que le complace.

Muchas veces la agradé
y la creí satisfecha
y después sin un por qué
se me mostraba molesta,
mas recuerdo que una vez
sí le duró lo contenta
y fue después de leer
alguno de mis poemas.

Por ello desde ese entonces
yo le escribo a la mujer
porque me sobran razones
a no tratar de entender,
el cambio de sus humores
y ha de ser mi estupidez
que para evitar reproches...
sus respuestas... ¡No me den!


Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

QUIMERA.


Tan larga soledad que al sueño procura
Nácar y veneno y el miedo a perderte
Fuete celeste de etérea locura
Esperando cual deseo, de nuevo verte.

Deseo de un rojo que emule a tu labio
Entre rosales te veo y a veces palmeras
Discurso aguarda de la talla de un sabio
Cuando verte…solo palabras sinceras.
               
En tus ojos el anochecer y la luz primera
Vigilando en el horizonte tu silueta resuelta
Y al tenerte en brazos y la pasión devuelta
Dejarás tú de ser, una quimera…


Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

sábado, 4 de abril de 2020

TE ESPERO AQUÍ ESTA NOCHE.


La noche calma mi ansiedad
los  días para vernos son
difíciles de verdad
No sabes cuánto
Me atormenta esta soledad
por eso es que pretendo
que vengas esa noche
por piedad.

Si pudieras comprender
que no soy nada sin tu querer.
Por las noches se anidan a mis
pensamientos tantas cosas
de nuestro ayer.
Y recuerdo ese atardecer
cuando la brisa acariciaba tu cabello
y suavemente lo hacía mover.
Creo que sin tu amor voy a enloquecer.

A sabiendas de que esa noche
estarás aquí
preparé todo para hacerte feliz.
Aunque sé que al salir el sol
te olvidaras nuevamente de mí,
lo compensará, así es que
igual esperaré por ti
porque te quiero aquí.

Mi vida contigo es feliz de noche
porque me alegras el alma sin derroche.
Si el cielo se vuelve gris, de repente
no sé qué haré, si no vienes esa noche…
creo que moriré.
Pueden pasar días, meses y años
pero seguiré esperando
que vuelvas a mi lado.
Mi vida, es vida cuando estás conmigo.


Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

SÁBANAS DORMIDAS.


Sobre una sábana de seda,
tu cuerpo se desvaneció,
apretado entre mis manos,
te dejaste caer.

Volví a levantar tu alma encantada,
y en un veloz abrazo,
convertimos nuestra dicha en pasión.

El espacio era tan nuestro,
como el tiempo,
la danza y la locura,
en dos almas que se funden.

Por tu gracia y tu encanto,
me deje llevar,
a destinos que la luz,
siempre nos quiso llevar.

 El ritual de tu mejor sonrisa,
 adelantaba la noche,
 para que los ángeles del cielo,
 te pudieran bajar.

Abracé una vez más tu cuerpo de seda,
lo apreté suavemente sobre mi pecho,
pero mis ojos me advirtieron,
 que con lágrimas estaban.

Un mar de lágrimas,
 comenzó a resbalar por mis sábanas de seda,
eran todas las lágrimas,
 que me dejaste antes de partir,
 fue la noche que me dejaste solo,
 con tu sombra; bailando entre mis sábanas dormidas.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

AHORA TE LLAMO DESDE AQUÍ.


Pero, ¡mira!, ahora te llamo desde aquí,
desde el mundo del tiempo, de la no eternidad,
desde el mundo de la impermanencia, te llamo,
te llamo a ti que ya estás
definitivamente en la eternidad.
Qué raro, mi amor, hace un momento nos dejamos,
hace un momento nos despedimos,
mirándonos,
y ya eres para mí inalcanzable
como si hubieras muerto hace miles de años.
Sin embargo, hace solo un instante, tu mano
respondía a mi mano que la apretaba,
hace solo un instante
estábamos en la misma dimensión del tiempo.
Pero, ¡mira!, ahora te llamo desde aquí
y tú ya eres lejana y remota y antigua
cuanto las mujeres del mito, cuanto Eurídice,
nuestra añorada Eurídice que también, como tú,
estaba aquí hace solo un instante y, como ella,
cuando ya estabas por retornar a la luz, por asomarte otra vez
a este nuestro mundo en la luz del sol,
en la luz de nuestra historia, tuviste
que volver hacia atrás, hacia la oscuridad,
hacia el límite del umbral insuperable,
porque yo también, como Orfeo,
el más infeliz de los hombres,
me di vuelta para mirarte.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

ESTA ES LA CUESTIÓN.


Ojalá y nos tome la vida,
Nos estruje tan fuerte que terminemos
Tan cerca y próximos uno del otro,
Hasta sentir tu pulso, pisar tu sombra,
Sentir tu aliento y tocar tu boca.

Maldita es la distancia,
Pero justa es la esperanza.
¿Será cuestión de melancolía?,
¿Soledad o del exilio?
Pero de esto estoy seguro;
Que, a los dos, nos importó poco el orgullo,
Y ya lo antes sucedido.

En unos minutos será abril,
Y yo estaré en mi cuarto esperando por ti,
Y tú pensando en lo que yo nunca sabré.

Las dudas son largas, y el problema no son ellas,
Sino lo que viene después de las preguntas.
Por ejemplo; ¿Si estás aquí porque me quieres?
¿Estás aquí porque te gusto o simplemente
Porque te has sentido sola?



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

ESTE AMOR.


Mi fiel acompañante,
Mi confidente,
Ya no duermes en mi pecho.

Ya no me dices tus penas,
Ya no me despiertas
En las mañanas.

Ese mi pesar,
Ya no tengo a quién contarle mis cosas
Mis emociones.

Mis sentimientos,
Desde el día que partiste,
¿Pues a quién he de adorar?

¿Ahora a quién he de acariciar?
Pues al perderte todo cambió
Dentro de mí.

Amiga mía hoy sé que eres feliz,
Que estas en otro plano,
Hoy sé… que tienes paz.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

LOS RECUERDOS SON PRESOS.


Lentamente la noche,
arrastra la nostalgia.
Los recuerdos afloran.
Se presenta la magia.
La canción redentora,
que suavemente sana.

Coros de letanías.
Anuncian la llegada.
El sueño tibio espera.
Los sentidos alerta.
Mientras la madrugada.
Juega a seguir soñando.
Demora su presencia.

Se altera la conciencia.
Sabiendo que está cerca.
Las promesas se rompen.
El deseo se alimenta.
Y en la ciega vorágine.
Sin normas ni fronteras.
Se van forjando a fuego,
verdades y quimeras.

Las batallas en liza.
Peleas son internas.
Del recóndito anhelo,
de sin lucha ganarlas.
Sin dar nada vencerlas.
Las victorias son nuestras,
y las suyas no cuentan.

El tesoro está oculto.
Soportando la espera.
Las razones son muchas.
Pero todas ajenas.
En el limbo soñando,
se resuelve el dilema.
Los recuerdos son presos.
Eternamente medran.




Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

PASA BORDEANDO LA VIDA.


Pasa bordeando la vida,
mientras el tiempo indeleble,
va jugando su partida.
Haciendo bodoques gira,
como una noria infinita.
Impasible se desliza,
sin ojos, manos o vida.
No espera ni tiene prisa.

No se salva la cordura,
con arrumacos de magia,
ni es la locura más trágica,
cuando es corta su andadura.
No se rodea la distancia,
que crece en la criatura,
cuando falta la experiencia
y están sus pasos en duda.

La flor marchita y sucumbe,
en su condición fenece,
como nueva flor que crece,
en el lugar que otra ocupa.
Así, se va y nace la vida,
entre nacer y crecer.
Es constante su deber,
para subsistir poder.

Se va suavizando el gesto,
cuando la mente transita,
por senderos de esperanza.
Va sembrando la templanza,
granos de semillas sabias
y se relajan las olas,
de las agitadas aguas,
en una corriente en calma.

De puntillas se desplaza,
el recuerdo en la nostalgia,
en los diminutos pasos,
que en los sueños se retratan.
Se van cruzando las penas,
con ruidosas carcajadas
y los destellos se apagan,
cuando la sombra es más larga.

Pasa bordeando la vida,
los abismos que la acechan,
los ojos como luceros,
en la penumbra se avivan.
Pasan bordeando los sueños,
las dudas y los anhelos
y van pasando entre brumas,
los amores verdaderos.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri  

ACARICIA MI ALMA.


Pasa el río de aguas tranquilas y transparentes;
que acaricia la flor con suave remanso...
¡Que recorre grandes praderas...!
Y, yo, con el pensamiento llego hasta el infinito...

... y a lo lejos diviso el jardín de mi madre,
que hace tiempo no riegan sus plantas,
que ya sus flores... marchitas están;
hay una planta que se llama albahaca            
o creo, que también le dicen hierbabuena.

... y diviso la niña que cruza y acaricia las flores,
riega el jardín con suave rocío...
Y el viento que sopla, acaricia las hojas;
¡me encanta este aroma que acaricia mi alma!...

Y, entre recuerdos me llené de suspiros,
como quien llena un poema de lindos versos.



Autor
Antonio Carlos Izaguerri