Eres mala de los pies a la cabeza,
malévola sanguinaria, venenosa, e infiel al mismo tiempo.
no vales nada, solo piensas en sexo y dinero,
te vendes al mejor postor, me das asco y lástima.
no tienes corazón disfrutas del dolor y del placer por que
no conoces el amor.
tienes el corazón podrido eres perversa por naturaleza y
mala hierba por sospecha...
Mala mujer por la perseverancia,
por las carencias en ausencia,
por el trabajo bien logrado,
y por el menosprecio a ser menos afortunada,
mala mujer por el respeto a la integridad,
y por el honrada reputación,
que se desviste de bondad a maldad,
para sublevar la virtud,
si, mala mujer por el atrevimiento,
por el lenguaje y argot en mal entendimiento,
cuando el sentimiento en presentimiento,
cuando la bondad se la come el más listo,
y a la maldad no hay quién le ponga un pies por delante...
Devoras sueños y construyes fantasías muertas,
manos de pintura y rostro de noche de perros.
Amargas con tus encuentros, vil sentimiento,
tus ojos proyectan la explosión y destrucción
de la luz blanca y azul , mala y perversa
que con tus hilos manejas un mundo de crueldad y
decaimiento,
mala como un gusano hambriento, mala como tu encuentro...
Mujer me hiciste llorar,
Mujer, jugaste conmigo
Primero me diste tus mieles
Luego me echaste al olvido
Solo te burlaste de mi
Por tu amor te di mi todo
Tienes hielo en el corazón
Por amarte he caído al lodo
Eres fría, estás seca...
Me destrozaste el corazón
Vas por el mundo naufragando
Tragas hombres por diversión
nunca debí pensar que en tu mente podía entrar
solamente me querías derrotar
mas como presa fui a buscar
tan solo un poco de tu amor
hallando en ti la esencia del dolor
aquella agridulce pasión
que acabo con mi ilusión
tus ojos como lanzas de fuego
tus brazos cadenas del averno
maldita seas en nombre del lamento
mala mujer creada en sortilegios
no tienes vergüenza de tus actos malévolos,
porque te
ofreces por placer.
estas condenada y manchada de lujuria,
de frialdad, de
lamento y sobre todo veneno.
tu conciencia es oscura y vana maldita
entre todas las
mujeres vaga sin piedad,
sin nombre ni apellido...
alma oculta...
Autor
Antonio Carlos Izaguerri