sábado, 9 de mayo de 2020

TU SUAVE AROMA.

En el frío de la madrugada,
sentí tu tibia mano
acariciando mi cara,
sabía muy bien que eras tú.

Un amoroso beso
depositaste en mis labios callados,
sólo mi respirar se escuchaba en el cuarto.

Quise abrir los ojos
para mirar tu rostro,
pero no pude, sólo en mi corazón
sentí tu presencia cerca.

Al fin, cuando desperté
y recordé ese beso lleno de cariño,
percibí tu suave aroma en mi almohada,
indudablemente fuiste tú,
quien en la madrugada
me hizo sentir tan bello momento.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

CON OLOR A SEXO Y LUJURIA.


Sentados en el Bar con una copa de vino
Con el fondo de música jazz
A media luz huele un perfume fino

Tu mirada me habla invitando a lo prohibido
Y sonríes con gesto erótico
Pensando en la escena candente de estar conmigo
               
El calor ha subido recorriendo nuestros sentidos
Haciendo sudar nuestra piel
Respondiendo a la intención del sensual desafío

Sin palabras nos acercamos y la respiración se acelera
Se desborda nuestro lívido
No sabemos que decir y el beso no espera.

En un estacionamiento oscuro
Y en el asiento de atrás
Los dos en orgasmos somos uno.

No hemos pudimos llegar a la habitación
Las ganas desenfrenadas de sexo
No nos han dejado opción.

Sentada sobre mí, con solo tu cintura en desnudez
Te mueves apretándome rápidamente
te desbordas como hace el agua una y otra vez.

Y al crecer aún más caliente y palpitante
En medio de tus cremosas paredes
Los espasmos son más intensos y abundantes

Y los gritos tan orgásmicos
En un interminable vaivén
Tu cuerpo sacudiéndose con fuerza

Va dejando empapado el asiento
Con un intenso olor a sexo
Sintiéndome de nuevo tan bien

Por tu aliento, tu temblar, tu embeleso
Viviendo el éxtasis de tu furia
En medio de largos jadeos de lujuria.

Este momento ha sido de pasión hasta el desborde
Me has arañado sacudido y mojado
Y ni siquiera sé tu nombre.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

REVÉLATE MUJER A MIS SENTIDOS.


Revélate,
vuélvete tinta indeleble e impregna cada parte de ti sobre mi cuerpo,
siente el descaro puro de mis manos
y naveguemos juntos sin parar hasta agotar el último suspiro,
que hará saber al mundo,
que la pasión nos merece un nuevo nombre.

Revélate,
rétame a ir a la conquista de tu derriere casi bendito
y entre el aroma de rosas
confunde mis sentidos llevados por el frenesí
que en llama viva te reclama,
porque tú, mujer ardiente,
me quemas y consumes a tu antojo.

Revélate,
rompamos paradigmas y amémonos de todas formas posibles,
paséate vestida de piel frente a mí,
y deja que te admire en flor,
hasta poder desojar de ti
al último vestigio de tanto placer acumulado.

Revélate,
desata en mi al deseo que solo por ti es llenado
y queda tendida sobre el lecho,
mientras mis dedos hacen remolinos sobre tu cuerpo entregado,
déjate llevar por tu respiración acelerada
hasta que ya sin sed nos vuelva por fin la calma,
aquella que traerá el presagio,
de que una tormenta de amor volverá a inundar la cama.

Revélate,
deja que le muestre al mundo que tú eres solo mía,
y que el tiempo solo ha sido un requisito para estar vivos
mientras este amor cruza más allá de sus senderos,
revélate al fin
y liberada de todo lo que pesa al mundo
déjame hacerte ver que todo lo que necesitas para ser feliz,
es que, por siempre,
permanezca para siempre junto a ti.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

viernes, 8 de mayo de 2020

VIVIR CRUZANDO LA VIDA.


En el mar de las pasiones,
voluptuosas sensaciones,
marejadas de deseos
e impulsos devastadores.
Olas de influjos que azotan,
en las mentes y los cuerpos,
subyugando las ideas,
derribando y construyendo.
                               
La corriente entre las aguas,
arrastra vida y recuerdos,
con penurias y alegrías,
risas, decepción y juegos.
La voz crispada en los ojos,
en los labios las desgana
e infantiles amoríos,
como volutas que bailan.

Rebrotan en los deseos,
novedosos sentimientos,
cuando es más cálida el alba,
cuando el fuego es más intenso.
Cuando cruje entre los brazos,
el agradecido cuerpo.
Brotan sentimientos viejos,
cuando el abrazo es más tierno.

Ausente queda la estancia,
en la mente que se aleja,
hacia otro plano ascendiendo.
Transcendiendo las premisas,
voraz busca el pensamiento,
nuevas ideas, nuevos sueños.
Volátil se torna el cuerpo,
que ingrávido queda quieto.

Torbellino de emociones,
que se apropia del deseo.
Devoran hambrientas fauces,
las inquietudes y anhelos,
el abrasador aliento,
que en cada latido sienten,
carnes, órganos y huesos,
entre los seres sintientes.

Amor que enardece y cura,
que apacigua y fortalece.
Amor que salva y que mima,
con el poder que transfiere.
Amor que en el verbo anida,
creciendo en su tierno vientre.
Amor, que en la criatura,
de su lógica transciende.

Vivir, cruzando la vida,
donde el amor nace y crece.
Soñar, viviendo sentida,
la realidad que acontece.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

MIS VERSOS DESVELAN.


Desvelan mis versos en tu espera,
entre noches oscuras o serenas
y en esa vigilia tu virtual quimera,
se hace verbo en mis entrañas.

Y se enciende en ti mi inspiración,
plasmando en papiro mi ansiedad,
pero allí muy dentro alma y corazón,
es vivencia y beatificación tu beldad.

Y junto a mis versos desvelas tú,
cual mar extendida en mi lecho
y entre mis deseos y la noche azur,
la brisa de tu suspirar en mi pecho.

Mis versos desvelan pero entibian,
con cada suspiro exhalado al aire,
y tu efigie con excelsitud y donaire,
magnas  formas que rimas inspiran.

Desvela mi alma y la noche duerme,
porque no quiere que seas un sueño,
prefiere vivirte y por siempre tenerte,
en la excelsitud de tu rostro risueño.

No distantes tu recuerdo y mi desvelo,
como no distan pensamiento y deseo.
Tan cerca como la Gloria y su cielo
o el ansia de ti que en el alma poseo.

Escucho tu voz diciéndome voy
y en silencio mi voz dice … Ven,
porque donde estas y donde estoy,
unidos estamos por un solo anden.

Y desvelan mis versos en tu espera,
en esa espera optimista, no vana,
porque al final de la noche o temprana,
vendrás a hacer realidad mi quimera.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

ENCUÉNTRAME.


Encuéntrame
Cuando tomas tu desayuno
soy el café de tus mañanas
en la taza donde bebes.
Encuéntrame
Cuando caminas por la calle
soy la sombra que tus pasos sigue.
Encuéntrame
En la banca del parque donde te sientas
a descansar y a pensar en mí
estoy allí; siente mi mano acariciando tu espalda.
Encuéntrame
En tu lecho,
Soy la sábana qué cubre tu cuerpo
y la almohada donde dejas tus lágrimas.
Encuéntrame
Cuando te bañas en la regadera
soy el agua que acaricia tu cuerpo.
Encuéntrame
En tus mañana cuando lees el periódico,
soy la noticia que lees, qué estoy triste sin ti.
Encuéntrame
En tu paseo cotidiano
soy quien camina a tu lado.
Encuéntrame
Cuando quieres compañía en tu soledad
solo nómbrame, soy quien toma tu mano
para juntarla con la mía y caminar juntos.
Encuéntrame
Cuando las lágrimas de tristeza aparecen en tus ojos,
soy los labios que bebe tus lágrimas.
Encuéntrame
En tus pensamientos y víveme en ti
como tú vives en mí, de día y de noche.
Encuéntrame
En tu corazón es allí donde quiero estar
como tú estás en el mío, ¡Vivo Amándote!
Encuéntrame cuando quieras saber de mí,
Siempre espero por ti de día y de noche.
Creo en los milagros y tú eres un milagro en mi vida.
¡Encuéntrame, allí voy junto a ti huele mi piel que te roza!
Siempre tuya, siempre mío. ¡Ojos míos de mi querer!





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

EL BESO QUE NO NOS DIMOS.


Tan apresurado paso el tiempo y a la vez tan lentos los segundos, cada movimiento de las agujas del reloj iban acorde con mis pulsaciones, tanto, que mi respiración se agitaba junto con un corazón sollozo, como manadas de caballos galopando.
                         
Fue tan severo y explícito aquel momento; como el marchar para no volver, como un adiós sin vuelta atrás, como tan solo un insignificante balbuseo a la hora de mirarnos fijamente, sin mencionar absolutamente nada.

Se sintió fríamente el instante, la ley del hielo se pudiese así apreciar, con las ganas inmensas de romper ese drama, con aquel beso que no nos pudimos dar; y sin mencionar que tu también lo quisiste, puesto a que en tu cara, se mostraban tus labios rojizos frente a los míos se deseaban tanto y más.

Cabizbajo di media vuelta, tú también por otro lado quisiste andar, no aguantaba el gozo retumbar, que tu, bella dama me hiciste sentir en esos segundos de libertad, al voltear para romper el silencio con besos, justo con alguien te ví, y me tube así que marchar.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

AÚN LA NOSTALGIA BRILLA.


Aún, la nostalgia brilla en los albores de sus días.
Postrado frente al sagrario, el asonante triste llanto
descubre el rojo calvario en el cristal de su manto
y lleva la oculta arcilla de amor, a las grafías.

De los tiempos de alborozo  a las horas de congoja;
del ruido de las canciones al silencio imponente,
que promueve destrozo como el viento que deshoja.

De las historias veladas a las obras de ficción;
de versos en comuniones a un frenesí suplente,
que baila nuevas tonadas en fiesta de la traición,

Si al crédulo amor se humilla y le roban sus fantasías,
no es un perenne rosario lo que cura el desencanto,
menos se hace un santuario con flores de amaranto.
¡No hay desierto en la mejilla con el sol de siete días!





Autor
Antonio Carlos Izaguerri. 

¿TU NOMBRE?


El cometa señaló
Nuestras enlazadas almas.
Peculiar presagio
Que fuimos descubriendo
Hasta juntarnos las palmas.

Despertamos un día ...
Cualquier día de primavera,
Yo tocando tus senos,
Y tu mi falo, ¡vaya enredadera!
De templos intercambiados.

En los sueños te me lucias
Risueña e inspiradora.
Mujer luchadora
Que sólo mi alma conocía.

Decidí buscarte a ese remoto pueblo
Que por las noches se me exhibía.
Llegué a desesperarme
Porque no te encontraba, se nubló
Llovió un montón, pero mis ganas no retrocedían.

Subí hasta el valle del inframundo
Allí, donde tu licor a la diosa le ofrecías.
Tomé el sake, viaje al tiempo pasado
Justo antes, de que cayera el meteorito
Que acabaría con tu pueblo y tu vida.

A pesar de los intentos,
Para desalojar los habitantes.
Nadie creyó, eras una loca a los gritos
Sólo tú y tu amigo, escaparon cuanto antes.

Quien iba a pensar ...
Que ese  gran cometa
Se desintegraría, y así diezmar,
De repente, a toda tu gente de la aldea.

A los días, llegaste a mi ciudad
Querías estudiar en la capital.
Y tu sueño, a partir de una pesadilla
Se hizo realidad.

Curioso fue después
Verte en las escaleras.
Cuando una estampida
Precipitada hizo que saliera
Instintivamente de la estación.

Aún con el corazón en el cuello
Y titubeando te pregunté
¿ Chica, te conozco?
Viraste el rostro, y noté ...
Que habían par  de lágrimas en tus mejillas.





Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

UN AMOR EN LIMBO.


Dos almas perdidas
Se encuentran
En un lugar extraño
Ambos sin esperar
Que se encontraran
En limbo
Dos almas dolidas
Se encuentran
En un lugar extraño
Se empiezan a conocer
Uno reconoce
Que el otro
Es un alma con muchos valores
El otro reconoce
Que el otro
Es un alma con mucha educación e inteligencia
Dos almas con esperanza
Se encuentran
En un lugar extraño Se empiezan a conocer
Ambos desean amar
Uno al otro
Dos almas aprendiendo a amar
Se encuentran
En un lugar extraño
Se empiezan a amar
Uno al inicio
El otro mar tarde
Dos almas en conflicto
Se encuentran
En un lugar extraño
El conflicto
Es lo que los unen
O es lo que los separen
Dos almas confundidas
Se encuentran
En un lugar extraño
Uno con pretendientes
El otro con seguridad
Un amor en limbo
Un amor con futuro
Un amor con valor
Un amor con esperanza
Dos almas independientes
Se encuentran
En un lugar extraño
Separados por un tiempo
Uno va al infierno
El otro regresa a la tierra
Dos almas separadas
Se encuentran
En un lugar distinta
Uno pagando el precio por sus pecados
El otro
Una segunda oportunidad
Dos almas separadas
Se vuelvan a encontrar
En un lugar extraño
Uno ha pagado por sus pecados
El otro
Ha aprendido de sus errores
Dos almas con esperanza
Se vuelvan a encontrar
En un lugar extraño
Empiezan a platicar
Uno le dice del infierno
El otro le dice de como
Ha aprendido de sus errores
Dos almas sorprendidas
Se encuentran
En un lugar extraño
Se vuelvan a comunicar
Uno escucha con sonrisa
El otro escucha con terror
Dos almas en comprensión
Se encuentran
En un lugar extraño
Uno abraza al otro
Y le dice
Te entiendo
Te amo
Quiero que estés bien
Conmigo siempre estarás protegido
El otro lo abraza
Y le dice
Gracias por su atención, comprensión, afecto y por enseñarme amarme
Un amor en limbo
Un amor con futuro
Un amor con valor
Un amor con esperanza
Un amor con aprendizaje
Un amor con comprensión
Un amor con afecto
Un amor con ternura
Un amor que dura
Un amor con resiliencia
Un amor humilde
Un amor por siempre.




Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

GUARDIA Y CABALLERO.


El tiempo es un viejo sabio,
que va de barba larga,
que va de bata blanca,
esperando a los años,

Cuidándonos de los daños,
curando lo incurable,
trascendiendo lo inmutable,
mirándonos desde ángulos varios.

El tiempo, viejo sabio,
siempre al pendiente,
nunca de labios,
siempre de mente.

Y demente es buena descripción,
a veces se deja pasar,
sólo para curar un corazón,
a veces te deja en paz,

para que te encuentres con tu verdad,
a veces, acaba la voz,
para hablarte con libertad,
a veces te llena de paz,

para que te encuentres sin la razón,
siempre te libra del mal,
y eso es buena razón,
para agradecer dicha libertad.

Es un viejo sabio,
sin arrugas en las manos,
con el alma entre sus ojos,
con la vida entre sus lazos.


¡Gracias por tanto,
gran viejo sabio!




Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

TANTO SOÑÉ CONTIGO ...


Tanto soñé contigo que pierdes tu realidad.
¿Todavía hay tiempo para alcanzar ese cuerpo vivo y besar
sobre esa boca el nacimiento de la voz que quiero?
Tanto soñé contigo que mis brazos habituados a cruzarse sobre
mi pecho cuando abrazan tu sombra, quizá ya no podrían
adaptarse al contorno de tu cuerpo.
Y frente a la existencia real de aquello que me obsesiona y
me gobierna desde hace días y años,
seguramente me transformaré en sombra.
Oh balances sentimentales.
Tanto soñé contigo que seguramente ya no podré despertar.
Duermo de pie, con mi cuerpo que se ofrece a todas las
apariencias de la vida y del amor y tú, la única que cuenta
ahora para mí, más difícil me resultará tocar tu frente
y tus labios que los primeros labios y la primera frente
que encuentre.
Tanto soñé contigo, tanto caminé, hablé, me tendí al lado de
tu fantasma que ya no me resta sino ser fantasma entre
los fantasmas, y cien veces más sombra que la sombra que
siempre pasea alegremente por el cuadrante solar de tu vida.




Autor
Antonio Carlos Izaguerri.  

ESTOY PENSANDO EN TI ...


Estoy pensando en ti
y el tiempo se me pasa,
las horas ya no cuentan
y ansío tus palabras,
los sueños e ilusiones
cargados de esperanzas,
la lluvia no me importa
y el frío no me espanta,
te busco entre la lumbre
y el fuego con sus llamas,
que aviva las pasiones
y sangre de las brasas,
pero es tan delicado
el cáliz que me aguarda
y el beso que me ofrecen
los labios de tu alma...

Que estoy pensando en ti,
no importa la distancia,
ni importan los momentos,
si encuentro la mirada,
tú tienes esa llave
y el néctar que me falta,
lo llevas en tus versos
que escribes y desgranas,
por eso yo preciso
las voces con tus nanas
que lleven a mis sueños
en brazos a la infancia,
así podré dormirme
sentir la luna blanca,
rozarme con sigilo
llevándose mis lágrimas ...

"... Estoy pensando en ti,
se quiebra la garganta,
al tiempo que mis labios,
susurran que te aman ..."




Autor
Antonio Carlos Izaguerri.