Mi linda flor es mi poesía,
la que me inspira cuando me da su amor,
sea por las noches o cuando llega
la aurora a prepararme algo suculento;
porque tenemos el mismo gusto
del plato que yo le tengo,
gozamos de todo
y somos felices cada vez
que nos amamos con pasión,
en cada encuentro de amor.
Es la flor de almendra
que tintinea como amor en mí.
Es la alfombra de azahar,
el suelo que sigue la elevación
de tu alma de fruta.
Eres tú, la flor del yermo.
"En el Amor, soy poeta afortunado
yo cultivo en mi Jardín
Orquídeas, Claveles, Jazmín
y a las Mujeres Hermosas
De colores muchas Rosas
Para ellas he cultivado".
La poesía es más que una flor
cuyo aroma acaricia tus versos,
como pétalos al sol.
Rosas, azucenas y violetas
difieren con el candor
y el viento colma sus hojas
de un celeste resplandor.
Uniendo los versos
se enreda el perfume
de las flores,
que abren sus brazos
con el fresco arrebol.
Eres la flor más linda del jardín de mi vida
Tu mi hija mi princesa mi flor divina
Haces que vida tenga sentido por muy feo que
este el paisaje
Tú lo haces que se vea florecido
Gracias Dios por mandarme esta flor linda.
La poesía brota
de arroyo imperfecto.
Es bálsamo reparador para las heridas
Que con su caudal toca.
Existe el soneto y el verso libre.
La belleza de la forma
y la estructura rota,
que a los sentidos
y sensibilidades, en su locura
envuelve y roza.
Me enrollé un poco
A otros el turno toca.
"Para mí la Poesía
Es como la Flor Más Linda
Cuando el Poeta le Brinda
Su Música y Fantasía
Con Melodía de Colores
Para atraer los Amores
y también la Alegría"
Me abro como una linda flor
Para desnudarte mi alma
Y poder percibir tu olor
Que representa mi gran calma.
Ven y escoge de mi jardín
Entre las rosas y claveles
Tan bellas como un arlequín
Para dormirte en mis laureles.
El sol fortalece tu belleza
Y solo florece cuando llega su resplandor,
resplandor que embellece la creación rodeándote
de dulzura.
te visitan las mariposas que van de flor en
flor.
Eres muy bella mi flor
Y te cultivaré siempre con amor
Tan amaré más allá de Mis Sentimientos
La flor del poeta crece en la maceta
huele a versos y habla con los tiestos
un día que llovía yo vi una que dormía
nada más y nada menos que una flor soñando
las cosas que pasan,
escribes versos y se te acuestan
a dormir la siesta.
La poesía y la flor
van cogidas de la mano,
cuando se las quiero entregar
al hombre que yo amo,
no hay flor sin poesía
pues estaría incompleta,
sus pétalos se desojarían
al igual que mis letras,
por eso abrazadas van
en el jardín de los poetas.
Cómo me gustas linda flor
Cómo te encuentras primor
Cómo ha sido que te fuiste
Cómo te fue donde estuviste
Cómo te fue con aquel señor
Cómo te piensas que estuve yo
Cómo linda flor.
Madre flor de Liz
con sus amarguras y dulzuras
Madre flor de Liz
con sus certezas y sus dudas
madre
flor de Liz
te quiero y no te aguanto
madre Flor de Liz.
Linda flor,
abriste tus pétalos esta mañana sólo para mí.
Cerré mis ojos y agua de rocío corriendo suave
por el tallo.
Déjame un rato más dormir
y contaré tus pétalos como besos en tu suave
nuca.
¡Oh! mi bella flor,
semblante al horizonte,
resplandor que enmarca el paisaje,
aroma que endulza ambiente.
Pétalos llenos de juventud,
naturaleza viva que abarca lugar,
ganando territorio,
inundando la tierra.
Mostrando presencia,
cautivando a tu público,
siendo tu misma.
¡Oh flor, mi bella flor!
Te regalaría una flor
Linda, no tanto como tú
Pero no lo haré, está decidido
No quiero que compita contigo
Ni que me ponga en el dilema
De saber con cuál de las dos me quedo
Eres la flor más linda del jardín de mi
querer,
eres la hija que me ata a la tierra
la que me da ánimos a seguir y tener
fortaleza,
la que con su mirada y sonrisa la vida me
alegra,
porque tu amada mía, ahora eres lo único que
me queda.
Con pétalos de amor se hizo este dolor
con lágrimas frías se marchitó.
¡Oh noche helada
que lloras
sobre mi linda flor!
Mi más hermosa flor, mi poesía,
El fruto de infinita inspiración,
Purpúreas cascadas de pasión
que esconden ancestral sabiduría;
Y tú eres la princesa, vida mía,
La causa que oculta mi razón,
La llama que alimenta el corazón
Con una palpitante melodía;
Y tú eres esa diosa en mis locuras,
El huerto en que despierta mi placer,
Contigo he compartido travesuras
Que colman estas ansias de querer,
La cristalina fuente de ternuras
Que llena y le da forma a mi Ser…
Jardines de flores
crecen a mi vera,
de muchos colores
en la primavera.
Nada de esas flores
podrán competir
con tu amor sincero
que me declaraste
hace muchos años
cuando me encontraste
mirando a tus ojos
en algún boliche
mientras que bailamos
por primera vez
tu cuerpo y el mío
danzando en la noche
con tierna inocencia
para conocer
mejor tu persona
que quise querer
desde ese momento
por siempre después.
Deshojo tu flor
deshojo tu estrella,
de lluvia y delirio,
de lunas que esperan.
Deshojo tu boca
pétalos que enredan,
en un nido que moja
con agua de seda.
Deshojo el silencio
en tréboles de ausencia,
donde todo se acalla,
donde el tiempo es piedra.
Flor de flores, poesía,
Suave perfume que escancia
Y dona suave fragancia
Cual Mester de Cleresia.
Poesía, Flor de flores
Que va regalando amores
A los contritos amantes
Que sufren males de amor
Calmando el cruel dolor
Con bellas flores galantes.
"Como mis lindas flores
Engalanan la Belleza
del poema en su explendor
en espacio acogedor
lleno de Versos y Amores"
Cada día paso por aquel jardín,
adornado de hermosas flores.
Donde no importa la hora,
siempre hay una flor linda.
Una flor linda como tu alma,
de la cual sigo enamorado.
Ojalá en tu pecho florezca
de nuevo un amor igual.
Un amor igual de lindo,
como el amor que te profeso.
Poesía es cada uno de tus pétalos,
pétalos que luchan con la luz solar,
por siempre permanecer en su máximo resplandor.
Flor del norte , flor del sur;
dime que es lo que tienes que me haces perder
mi corazón.
Flor linda la rosa,
Bella flor el clavel,
Las dos, en ramos te regalaré,
Pero, bella y linda flor,
Solamente tú.
La flor renace
de dulce miel panales
colma la abeja.
Jardín de amapolas blancas
como el sol en pleno amanecer,
quien alumbra cada parte de mi ser.
diáfana mañana amanece en tus contornos
eres ser de luz brillante como estrella
viajando,
quemándose en el confín de mis sentimientos
reteniendo todo el amor en esta burbuja
llamada hogar.
La poesía, es una flor,
una amante apasionada
sin ella no tienes nada
porque ella es toda amor.
Flor Linda
Estás distraída luciendo tu belleza.
Eres bella por naturaleza.
No puedo dejar de mirarte.
Quisiera tenerte para mí.
Pero te escabulles de mis manos,
Cómo la respiración de mis entrañas.
La calidez de tu compañía me salva,
riegas una suave brisa con tu dulce voz.
Entregas esperanza a mi corazón marchito.
Y se contenta el amor por nuestro encuentro
fortuito.
Como una flor linda que se asoma apenas
amanece,
tu recuerdo me alcanza y el silencio
permanece.
Este día no caeré en el descontento, ni en la
desolación;
este bello sentimiento no sabe de rendición.
Esperaré con paciencia nuestro nuevo
encuentro,
volveremos a bailar en el aire rodeados de un
perfume floral,
nuestra danza delirante,
y de un ritmo celestial.
No sabía él, entonces, si su primario amor
añorado existiría
en aquel tiempo lindo de inhibido adolescente,
carga de alta pena y soledad cotidiana que
dolorosamente aducía,
trinchera del herido reclamo al principiante
corazón confidente.
Cuando apenas la descubrió, tan elegante, fue
por leve varonil intuición,
pasarela floral del realismo coqueto,
encantado de su blonda cabellera ,
dintel de un par de vivaces ojos, rectos hacia
su sorprendida dirección
que, muy célere y vistosa, conmovió el talante
de la antrópica friolera.
Estímulo para vulnerables firmezas ¡por fin!
en el ruedo social precipitaron
junto al sensible público clamor de prémiales
éxitos deportivos y estudiantiles,
broncíneas matrices que en modestos recatos de
graduación, aristas le destacaron
dando inmediato crédito evaluativo a novicio
rango, gurí de interesantes percentiles.
Una primavera llegó el beso de Proserpina, con
flores fáunicas en extraño éxtasis
unción de breve amistad con la niña rubia. Su
sentimiento morocho, lábil se consolidó,
aunque ciertos desencantos desérticos
crecieron, asfixiando la fertilidad de los oasis.
Finalmente la cuántica fragilidad de las
valencias del arenal...en su alma herida estalló!
Estaba más apto para asumir libros
curriculares como en estadios campeonar
que no tanto sensibilizar a igualdad etaria
corola de una más madura mujer,
e inválidas quedaron las dos gratas
sublimaciones que hacían muy felices su cantar.
En tanto -paciente- aguardaría certeras
flechas de Eros y la fructífera señal del ujier.
Así transcurrió una historia cortesana de
iniciales destinos en tenues brazos efímeros
compensatoria a fines de los sesenta con la
apoteosis de una nueva alianza sucedánea.
Resultó más plena la rica profundidad empática
que la de aquellos cariños primeros
¡Gracias a ti por el ensayo! La Gloria advino en
posterior era contemporánea!
Delicada como una flor
Radiante como una estrella
FLOR es tu nombre
Que inspiran poemas.
La forma de tu ser,
Esa forma que enloquece todo mi ser,
calculo sin remedios
que pudo ser lo que hice bien
Al levantarme cada mañana
pensando en el milagro de
ver tu luz florecer.
Que me llena y me calma,
Que me llega a lo profundo del alma,
Que le da sentido a mi vida,
Tu eres la flor más divina.
Con tu sola sonrisa
llenas el jardín de alegría,
pones a las flores en melancolía,
que lloran felices,
porque sólo tú las viste,
porque solo tu alma
llena de felicidad lo triste,
Porque sabiendo aunque morirán,
han tenido una vida llena de luz y felicidad.
Como yo cuando me vez con ojos de bondad,
Como yo cuando tú me vez solo por mirar,
Porque tú eres mi amor especial,
tu eres quien vino a salvar mi humanidad,
Porque tú eres el jardín del edén en mi vida,
Tu eres la flor más linda.
Andariego por doquier como cual vil jardinero
me he mofado de tomar las flores de abril y
hacerlas ramo.
Ramo de olvido que llevo conmigo,
y me arropa en el solsticio de invierno.
Flor tras flor deshojo el dolor de espina tras
espina,
pues ya lo dice el refrán:
No hay flor sin espina y qué lástima, pues sí
lastima.
Y así hasta el equinocio de Marzo
vuelvo a donde las flores de mis amores, dolor
de mis dolores.
Pero que caray!
¿Qué puedo hacer sino más que querer?
Dios pone y dios brinda,
y heme aquí admirando a la Flor más linda
flor de candidez
que desnuda mi vista
todo en ti es perfección,
aroma y color dan vida
a mi insipiente deambular
quiero junto a ti quedar
y con tus petaos cubrir
mi eterna orfandad
Mi flor bella, mi linda azucena,
no dejo de pensarte mi mujer color almendra,
eres el aliciente que calma mi alma,
la que me da fuerzas,
aunque algún día me invada la tristeza
y no tenga ganas de ir al rio
a buscar el agua cristalina entre la floresta,
Eres la mujer que más pienso,
la que vive en mi alma como un regalo
que me dio la vida al conocernos,
Por eso no dejo de quererte,
de añorar todos esos momentos
cuando éramos más jóvenes,
y tenía tus besos intensos
en mi cuerpo a cada momento,
como si viviéramos un amor de novela,
donde era tu amante, tu fiel compañero.
Haces con tus recuerdos
que cada vez que vaya al rosal me acuerde de
ti,
de la belleza que vive en tu alma,
del calor de tus caricias
y de tus palabras de amor al caer la tarde,
al decirme regresa pronto,
que te aguardo con ansias amor mío.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri.