domingo, 25 de febrero de 2018

POESÍA YA NO ME BUSQUES.

Poesía ya no me busques
porque te tengo olvidada,
tampoco quiero que me juzgues,
no eres por mí leída ni escuchada…

Poesía ya no me hables,
lo que digas no me interesa,
no me hagas sentir el culpable
cuando ya no estás en mi cabeza…

Poesía no digas que me amas,
yo no te llevo en el corazón,
ya no enciendes en mí la llama
que usé para escribirte con pasión…

Poesía no digas que soy diferente,
no hace efecto en mí la adulación,
pues a ti te escribe mucha gente
y yo soy uno más del montón…

Tampoco digas que lloras por mí,
que no puedes con tu desesperación,
cuando yo lo hice tú no estabas ahí
para consolarme de mi propio dolor…

Tampoco digas que por mí mueres,
existías desde mucho antes que yo,
seguirás viva, aunque yo desapareciere,
porque tu indiferencia conmigo acabó… 




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

PARA QUE TE ACUERDES DE MÍ.

Tal vez no sea perfecto. Pero... Quien lo es?

Sé que no me arreglo mucho y que a veces hago locuras pero te aseguro que nadie te amará como yo.

Sé que no sabes, pues no me conoces, pero si me dejaras conocerte te aseguro que no te arrepentirás.

Puedo decir que he amado. He amado con mucha intensidad, más de lo que he visto en los demás. Sólo porque circunstancias no estaban a mi favor no he logrado mi cometido, Que es por supuesto, entregar mi vida entera (hasta la muerte) a una persona.

Tal vez me canso rápido de lo mismo, o tal vez es algo más.

Pero, si me dejas, podría hacerte feliz. Al menos el poco tiempo que podríamos pasar juntos.

Te adoraré toda mi vida. Contemplar tu belleza y acariciar tu piel como nadie. Te daría muchos besos y nunca me dirás “tu casi no me das besos”, porque te daré todos los besos del mundo. Alargaría tu inteligencia y tu atención a las pequeñas cositas.

En serio te digo que serias todo para ti, sólo si me dejaras.

No te faltaría nada. Solo tú y yo te bastará para ser feliz.





Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

QUIERO BESARTE.

Quiero besarte mujer
desde la cabeza a los pies,
quiero besarte mujer
desnudar con mis besos tu piel
que sea tu cuerpo el lienzo
y mi lengua el pincel
quiero besarte mujer
apasionado, alocado,
hacerte gemir de placer,
quiero besarte mujer
como si se me fuera la vida
y tu aliento me hiciera volver.
Besarte mujer sin premura
hasta el amanecer, ¡besarte!
si besarte toda mujer                
besar tus piernas, tu piel
besar tu alma también,
besar tu espalda, tus manos
besarte de tal manera
que te sonrojes mujer,
besar e hablar con caricias
es el idioma universal del placer
por eso no emito sonido
sólo te habla mi piel
deja que hable mi cuerpo
de las ganas y el deseo
que me inspira tu placer. 




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

LETRAS Y ROSAS.

Mis palabras de amor yo te dejo
en ésta, cariño, mi última carta
mientras de a poco mi alma ya se aparta
porque de ti, yo muy pronto me alejo.

Te amé, cariño, sin par ni medida
como nunca antes había yo amado
y a ti te juro mi cielo te he dado
lo destacado que había en mi vida.

Mis besos dulces, callados, serenos;
en tu piel dejé mejores caricias
que fueron placer, amor y delicias
pero por hoy nos resultan ajenos.

Pues yo por ti escribí mi poesía;
y declamé mis mejores sonetos,
liras, romances, quintillas, tercetos;
repletos de luz y gran melodía.

En tu piel sembré mis más bellas prosas
con palabras llenas de sentimiento
vida te juro, verdad que no miento
fuiste jardín de mis letras y rosas.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

LA PAZ DE TUS CARICIAS.

Me desangro como un iceberg en llamas
perdido en un océano siniestro,
vagando soledades compartidas,
sintiendo el estertor de tus silencios.
Asomo la cabeza entre las aguas
pero las olas me escupen tus recuerdos,
el frio de tu voz me hiela el alma
y al filo de tus ojos me estremezco.
La noche pegajosa y pestilente
me envuelve, me acaricia me succiona,
se inyecta por mis poros como un filtro
que corroe mi ser y me emponzoña.
Y cada vez me siento más pequeño,
juguete de los vientos y las olas,
añorando la luz de tus estrellas
y el brillo deslumbrante de tu aurora.
Siento la sal amarga de tus aguas
anegarme los ojos y la boca
y el viento huracanado de tus miedos
arrastrarme por aguas tenebrosas.
Y ya no tengo fuerzas ni deseo
para seguir flotando a tu deriva
y me prendo en lágrimas de fuego
suplicando la paz de tus caricias.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

VENTANA MARINERA.

Anoche rompimos,
la luna a dentelladas,
rasgamos,
la empinada lengua del deseo,
en el fértil valle,
de sueños y esperanzas.
Anoche supimos,
ver un abril de amapolas,
en dos cuerpos enzarzados,
al borde de un abismo.
Tan sólo fue,
...una noche...
y ahora parecen veinte siglos.
Era una simple cama,
un catre rancio,
y ahora es ventana marinera,
donde la espuma se entrelaza.
En el diáfano color,
de pupilas anchurosas,
en el hálito fogoso,
que propaga los espacios,
avanzamos dentro,
el uno del otro,
más allá de la carne,
más allá del sentimiento...
...rizo contra rizo.
Esta ventana vetusta,
ventana marinera,
a lo noche espera,
pues ahora...
...con este sol que nos despierta,
sin su secreto nocturno,
se queda.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

A MARÍA.

Algunas así se llaman
 otras se hacen llamar
 todas ellas son María,
 lo fueron, lo son
 o quizás lo serán...

 Algunas tienen compromisos
 otras de ello tienen necesidad
 algunas tienen tiernos poetas
 que les riman en la oscuridad

 Existen otras que nada tienen
 y han venido a probar su suerte
 apuestan aquí cuatro monedas
 de esas blandas a los dientes
 mostrando una dudosa sonrisa
 jugar a la enamorada quieren..

 Se emborrachan, se marean
 sus poesías se obnubilan
 sus voces se entrecortan y callan
 parecen seducidas perder la vida...

 Y yo que soy gitanillo
 de esos que van de casa en casa
 que desconfío hasta de mi sombra
 y del espejo el reflejo de mi cara
 le digo sin muchos bemoles
 bajemos por un tinto a la cava...

  Allí se cuelga a mi cuello
  y me besa todo el cuerpo
 respondo hasta donde puedo
 ella pone su pollera en el suelo
 y yo me inclino entre sus enaguas
 juro no sé cómo llegó el día
 ni si me lavé la cara con agua...

 La moza ya no estaba
 ni la poesía ni el vino
 me quedaron mil besos
 y cuatro monedas blancas
 yo le escribí este poema
 para recordar sus caderas anchas
 recuerdo muy bien su nombre
 me dijo que se llamaba María...




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

sábado, 24 de febrero de 2018

ESTA NOCHE SERÁ PERFECTA.

Esta noche será perfecta
Porque estaré contigo,
sujetando tus manos;
Ahogado en tu mirada.
Esta noche será perfecta,
Porque morderé tus labios
Al pie de la ventana.
Sonreiremos juntos;
Bailaremos un vals
Dibujaré una caricia
En tu cintura escapular.
Hueles a jazmines blancos,
cítricos, y rosas.
Que agradable aroma.
Y morderé tus orejas;
Mientras suena Strauss.
Habrá Luna llena,
Luz perfecta para la alcoba.
Con sutileza,
Susurraré en tus oídos
poemas de amor.
Deslizaré mis manos,
Suavemente, lentamente,
por las tiras de tu vestido
que se sujetan a tus hombros,
de poros erizados y con escalofríos.
Seguiré besando
esa boca carmín de labios tiernos.
Son labios gitanos
Con sabor a cerezos.
El beso será lento, risueño,
mientras cae tu vestido de seda.
Me vestirás de Adán
Y te vestiré de Eva,
mientras mis manos
Encienden tu fogata,
Que quema tu alma entera.
Exploraré tu piel,
con mi lengua dibujaré
el paisaje de tus valles y montañas.
De tu fuente del deseo
 brotarán las mieles del pecado.
Las aureolas rosadas
Que escondes en tus senos
Las llevarás a mi boca,
domada por tus besos.
La luna hace su jugada;
 Y una tenue luz
entre rendijas entra.
Iluminando a nuestra alcoba silente,
Testigo inerte de nuestro encuentro.
El juego de nuestras pieles hace su debut.
No hay pudor,
No hay vergüenza,
No hay temor.
Solo pasiones que se desencadenan
En el vaivén de nuestros cuerpos
Tendidos en la cama.
En el arrebato por la pasión,
nuestros cuerpos
Saciarán el hambre lujuriosa,
Mientras me arropas con tu cabellera.
Y así, esta noche estará de fiesta
Porque amaneré contigo,
Haciendo de nuestro encuentro;
Una noche perfecta.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

AMOR A MUERTE.

Con esa mirada tuya, todas las mañanas fueron primaveras,
con esa sonrisa tuya,  todos los días fueron de alegría,
con esos labios tuyos, todos los besos fueron a muerte…
y  es que a muerte fue nuestro amor,  a vida o muerte
nos jugamos cada caricia que en nuestra piel ardía,
a vida o muerte nos entregamos, perdiéndonos
en un abismo profundo que;  tal vez fue amor,
tal vez fue pecado, tal vez fue solo un sueño,
pero entregamos nuestra propia vida,
 a cada segundo que al ocaso sobrevivimos,
 a cada crepúsculo que iba marchitando esto
que entre tú y yo vivió y murió,
y como sacrificio viviente incendiamos todo a nuestro alrededor,
no dejamos nada al olvido, no guardamos nada al recuerdo,
no quedó nada al lamento, ni al arrepentimiento,
Y es que a muerte fue nuestro amor, ¡a vida o muerte!
nos jugamos todo;  ¡hasta el alma! y en ese juego de suerte
consumimos cada uno hasta el Ser,
 ya no quedó nada para después,
ya no hay ni habrá un nosotros…
porque a vida o  muerte fue nuestro amor. 




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

PIDO PERDÓN, PIDO PERMISO, PIDO SILENCIO...

Pido permiso,
pido perdón,
pido silencio…
Ahora quiero que me dejen tranquila, quiero que me comprendan,
no me hagan preguntas, no hacen falta...
Espero que entiendan, estoy muy cansado y necesito descansar...
Es que he andado tanto y tanto por todos los caminos transitados,
amando tanto y tanto, dejando mis huellas y mi alma en cada paso transitado...
Y tengo los pies tan cansados!
Mi corazón inacabable fue derramando amor por todos los caminos, por todos los rincones…
Y en cada paso transitado, casi sin querer, en un vuelo mágico
entre la tierra y el cielo, se me cayeron todas las palabras de mi alma y de mis labios..
Y de andar tanto y tanto, derramando amor y palabras,
quedaron en la tierra cavados mis versos por todos los caminos, y por todos los rincones...
Allí estaré siempre en mis versos...
Mientras tanto me iré a buscar otros horizontes, otros cielos,
dejando en esta tierra mi mejor fundamento, el único que justifica mi existencia,
el amor derramado en todos los corazones de este planeta…
Estoy cansada, les pido perdón, espero que me comprendan...
No crean que me voy a morir, todo lo contrario!
Me voy a beber toda la vida de un solo trago...
Ahora voy a desplegar mis alas del alma y emprenderé el vuelo,
y aunque no puedas verme, yo estaré siempre, siempre...
Estaré en cada cosa que mires, en cada paso , en cada rincón...
en el susurro del viento, en el sonido de un pájaro, en el cantar de la lluvia,
y hasta en tu propia voz..
Voy a emprender mi vuelo, asi podre resurgir a la vida,
y será entonces un renacer eterno...

Siempre a tu lado...
si..!
Posdata, no dejo asignaturas pendientes...





Autor 
Antonio Carlos Izaguerri

EL CENTRO DE LA TORMENTA.

Donde cerraba los ojos y venia la tormenta.
Donde cerraba los ojos y el día claro del sol nacía.

Se alejaba el verano a pocos pasos pero la memoria de mi piel sentía que cada estación me traería un recuerdo, cada estación traería un suspiro y un abrazo de brazas, un paquete de alegría revivida.

Ya no siente nostalgia el otoño, hace poco que su amor me dio el alivio de los días húmedos y oscuros, las madrugadas de luz y piel crespada.

Rene no agrego contenido a la historia, había llegado sin preguntar, sin decir ni saber lo que pasaria, casi sin pensar su amor a si mismo se delataría.

Que aventuras espera el frio del de un año que se aproxima.. Cae febrero. Va muriendo.

Pero el crepúsculo de su vida... Apenas iba naciendo.





Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

ACEPTAR LA REALIDAD.

Es sin duda una de las claves de la vida,
no sé si la más importante,
pero si una de las patas de la silla,
Que si se rompe te sorprendes y te caes de bruces.
Voy a enumerar algunas de las claves para aceptar la realidad.

1) No se puede caer bien a todo el mundo. 

Si lo intentas y lo crees,
probablemente no aceptas la realidad,
vivirás en un mundo de fantasía y ausencia de verdad.

2) Si a ti no te gusta alguien,

tu tampoco le gustarás,
Es un... equilibrio de fuerzas antagónicas,
como mucho.. si te hace ilusión le serás indiferente.

3) Aceptar la realidad, es saber que hay personas que te critican,
porque no haces lo que ellos quieren o no te manipulan,
si te sorprenden es que no aceptas la realidad,
y probablemente no amas la sinceridad.

4) Aceptar la realidad es aceptar el desamor,

sobre todo el fin de una relación de amor,
Aunque también el no gustar,
o crear repulsa o indiferencia.

5) Aceptar la realidad es saber,

para quien eres importante,
y para quien no lo eres,
si tienes dudas.. lo más probable es que le seas inocuo o no potable.

6) Aceptar la realidad,

Es conocer tus virtudes y tus fallos,
potenciar las primeras,
y minimizar los segundos.

7) Aceptar la realidad es ver tu vida como un balance,

con tus bienes y derechos,
pero también obligaciones temporales y perpetuas.

8) Aceptar la realidad es amar la vida,

no como un lugar perfecto,
sino como un escenario donde actúas,
para mejorar la sociedad,
potenciar la bondad y al menos discrepar de la maldad.

9) Aceptar la realidad es tener tu propio criterio,

independiente y sobre todo coherente,
de los demás y de ti mismo.

10) Aceptar la realidad,

Es sobre todo saber encajar,
las decepciones, los disgustos,
las traiciones, los desamores,
y sobre todo tus defectos tanto físicos como psíquicos.





Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

TUS RECUERDOS.

 Tan corta la vida y tan grandes tus besos
insignes los gestos de tus fascies
inmensos tus momentos
tan corta la vida, y enorme el juramento.
te marchaste hace tiempo
y aun no puedo creerlo.

Ahogados en las noches aciagas,
transcurren en silencio
el correr  de tus recuerdos,
mojados en mi llanto
adornan mis huesos.

Mirad como pasa el tiempo tan embustero,
ayer brillabas como una estrella
la más grande del firmamento
y hoy solo te miro en  fotos
las más tristes del universo.

Tan corta la vida, pero no más corta que lo nuestro
todo lo vivido y  todos los encierros se acabaron,
yo aún  no puedo creerlo,
y estos versos de los momentos juntos;
hoy llenan mis tinteros.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

viernes, 23 de febrero de 2018

¿QUÉ HAY DESPUÉS DEL AMOR?

Después del amor hay
Un tóxico respiro
También una calle con menos obstáculos
Y suspiros
Y muchas horas para recordar
Arrepentirse y agonizar
En silencio o sollozando

Después del amor hay
Un sueño recurrente e insidioso
Y un despertar impotente
Y tembloroso
Que se diluye durante el día
Pero no deja de estar presente
Como gota fría
De pálido sudor.

Después del amor hay
Un tiempo a la deriva
Circunscrito a inhóspitos lugares
Y amigos que nos miran
Con ternura y compasión
Y seres queridos que tratan
De ayudarnos
A mitigar nuestros pesares
Y rara vez lo consiguen
Porque es demasiado
Fuerte el dolor.

Después del amor hay
Un período de espera
Una angustiosa convalecencia
Que a veces termina mal
Y otras veces se vuelve eterna.

Después del amor hay
Plagas y sequías
En el alma y en la piel
Y frustración
De los sentidos desmedida.

Después del amor… Ay
Es mejor no saber…
No sentir…
Decir adiós…
Perecer…
A menos que
Después del amor… Por ahí
Se encuentre algo mejor. 




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

NUESTROS ENCUENTROS.

Todo es relativo hasta el amor…
Me miraba en tus ojos,
y era todo lo que quería ver,
destellos de luz en tu mirada,
me rodeaban tus brazos y eras
todo mi mundo...
Nos reíamos por tonterías...
y así me di cuenta que contigo era feliz,
tu risa y mi risa eran como campanitas,
con un sonido angelical, era Dios,
que bendecía nuestro amor.
Nuestros encuentros...
Dios se reía con nosotros,
...Nos llegó a llamar par de locos,
así nos bautizó par “de locos”
Me encantaba llegar puntal a la cita,
al principio te hablaba con miedo,
con temor de no saber qué contestar,
Llegue a pellizcarme para poder creer
que hablaba contigo, contigo a quien
en mis fantasías deseaba,
buscaba en tus poema algo para mí,
y pensar que después fuiste todo mío,
todo de mí, cada noche,
cada día, de cada hora, de cada minuto.
Como quieres qué no te ame,
si me hierve la sangre cada vez
que estoy junto a ti, de pasión,
es una tortura querer quedarme contigo
abrazada a ti, sin sexo,
sólo abrazados al amor de los dos,
en tus brazos y en los míos,
en tus ojos y en mis ojos,
en tu boca y en mi boca,
ser tu aliento, ser tu vida, ser de ti...
Toda de ti, de nadie más,
ni con el pensamiento.
Anhelos de quedarme en tu piel,
en tu carne, en tus miedos de niño,
en tus locuras de hombre enamorado,
en tus fantasías conmigo, contigo,
en tus años que te faltan por vivir,
me veo contigo, me sueño contigo,
me abrazo a ti cada noche
me quedo en tu pecho,
soñando un cielo nuevo para ti y para mí,
lo hablaré con Dios para ver si hay un cielo,
para estos “dos locos” bautizados de sueños,
llenos de anhelos por vivir los dos juntos.
¡Te Amo, Amor!




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

TÚ... MI TARDE.

¿Qué puedo decir, no digo nada?
¿Mi silencio elocuente perturba tu oído?
¿Qué puede expresar la boca cerrada?
¿Continuo, o me doy por vencido?

La angustia diaria de mirarte
pareciese infinita e interminable
como el anhelo de poder amarte
en este mundo inasible y friable

Cayendo ante la noche como una sombra
desato mis cadenas oxidadas
en silencio sepulcral mi voz te nombra
entre días y noches sepultadas

No necesito ninguna excusa
para decir te amo, para decir te quiero
lo veo escrito en la niebla difusa
Tu eres mi tarde, porque en ti muero.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri.