Este fue un sueño de una noche de invierno
una sombra densa y fuerte
Me levantaba en vilo para sentarme sobre el
lavamanos
Sus manos atenazaban mis piernas por las
corvas
Mientras devoraba mi boca sus dientes mordían
la suavidad de mis labios
Fuera del baño solo se escuchaba el bajo
pulsante de la música
Su lengua estaba fría por el último trago de
margarita
Sus dedos jalaban mis bragas mientras a ciegas
buscaba
La dureza de mis pezones, me excitaba verlos
brillantes por su saliva
Y de un rosa encendido por sus dientes,
Su cabello estaba impregnado de humo y almendras
de los bosques más allá de la ciudad,
Quiero comerte completa me decía con frenesí
Buscando mi pose correcta
para que el me poseyera sin más preámbulo
Afuera alguien jalaba la puerta del baño
Pero el deseo ya era un demonio difícil de
domar
Cuando lograron entrar me encontraron pintando
mi boca
mis muslos temblaban aun y un dolor pulsante
me embargaba las entrañas
la bestia había escapado por la ventana la luna
llena
era un ojo místico en mitad de la noche
era una loba, una mujer o sólo un sueño de
deseos insatisfechos.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri