Tengo un armario lleno, de cosas que he
conquistado
para mí son tan valiosas, las conservo con
amor,
tengo de todo y variado pero si algo me sobra,
son quimeras y esperanzas ... que conseguí al
por mayor.
De todas las que más quiero, para mí la más
preciada
una medalla grandota que la vida me obsequió,
con una inscripción que dice: para este
caminante
que va buscando alegrías ... por esas calles
de Dios.
Si yo soy un perdedor, lo tengo muy asumido,
si perder es creer que hay, gente buena que se
expresa,
pensando en los demás y cumpliendo con la ley
no me importan "ganadores" ... eso a
mí no me interesa.
Famoso es el que con hechos, demuestra su alma
noble,
la vida le dio dos manos por eso te ofrece
una,
también te hace de guía cuando estás entre la
niebla
para actuar de esa manera...hay que ser
"master" de cuna.
Después delas cicatrices uno se olvida de todo
porque al pasar la tormenta, siempre ha salido
el sol,
al igual que los cariños que nos dejan
moretones
los curamos casi siempre...aferrados a otro
amor.
La gente corre aprisa, tras metas
inalcanzables
muchas veces los humildes se sienten más
realizados.
no hace falta estar, en la cresta de la ola
los de atrás suelen tener...muchos premios
facturados.
Soy de contarle seguido mis secretos a la luna
mientras una estrella amiga, me tira su
bendición.
las dos estaban de acuerdo que lo mío se debía
que hace mucho que una Diosa... no me toca el
corazón.
Quiero caminar este mundo y que un día me
recuerde
como aquél que siempre estuvo, ofreciéndole a
la gente
un pecho donde llorar y una palabra de
aliento,
ni peor ni mejor que nadie..este
"master" es diferente.
Autor
Antonio Carlos Izaguerri