Perdí mi rumbo tratando de seguirte, 
Me adentré a tu mundo sabiendo que te fuiste, 
Busco mi corazón ya que fuiste quien lo perdiste, 
Trate de seguirte pero eso me fue imposible. 
Soñé regresar a nuestros sueños planeados, 
A aquellos días a tu lado siempre  soleados, 
Aquellos días agarrados de las manos, 
Fuimos todo cuando al principio éramos extraños. 
Eramos dos humanos, jugando a ser dioses 
Eludiendo sociedades hostiles y sus venenosas voces, 
Siempre superando adversidades y sus roses, 
Tu siempre fuiste perfecta a pesar de tus acciones. 
Recuerdo, el día en que se esfumo la esperanza 
La enfermedad en su cuerpo empezó a deteriorarla, 
Luchamos juntos esta gran batalla tan larga, 
Mi amor perdóname por no haber podido superarla. 
Vives y vivirás en cada parte de mi mente 
A diario te sueño y despierto sin tenerte 
Eso día con día deja a mi corazón inerte, 
Mi amor no te preocupes que algún podré volver  a verte.
Autor 
Antonio Carlos Izaguerri.  
