jueves, 10 de agosto de 2017

MUJER DE CUARENTA Y MÁS.

La mujer de cuarenta y más
Tiene la pasión de esos años bellos
Para mí nunca será invisible
Es usted la mujer de mis sueños
La que me da de sus manjares
La de labios tibios y dulces
Y de manos sudorosas
Quiero vivir sus noches ardientes
Oler el perfume de su flor
Arrullarme en su pelo
Beber de su néctar sabor a cielo
Lavar mi cuerpo con su sudor
De su sangre escuchar el rumor
Ser dueño de su corazón
Llenar de su cuerpo los deseos
Quiero ser la causa de sus sonrisas
El ritmo de sus canciones
El guerrero de sus batallas
Despertar con usted
Todas las mañanas
La deseo en su naturaleza divina
Vestida como llego al mundo
Es usted la mujer que me engolosina
Celebremos felices nuestro amor
El fuego de su cuerpo me calcina
Es usted mi diosa del amor
Soy esclavo de su pasión
Mi alma esta encadenada a la suya
Es usted la dueña de mis pensamientos
No me importa decírselo mil veces
O gritarlo a los cuatro vientos
Mi corazón le pertenece
Es usted origen y destino de mis sentimientos
Su pureza es toda una aventura
Es usted mi regalo sin envoltura
En sus brazos pierdo toda cordura
La invito a celebrar nuestro amor por la llanura
Le prometo siempre tratarle con ternura.




Autor
Antonio Carlos Izaguerri

UNA ESPINA SIN UNA ROSA.

Tú eras perfectamente imperfecta.
Nunca espere encontrarme a alguien como tú.
Nunca espere perder a alguien como tú.

Eras una espina sin una rosa.
Me regalaste al vacío para salvarte a ti misma.
Cabello color pasión, alma sin color.

Tenías el cielo en los ojos y el infierno en los labios
bastaba una sonrisa para hacerme arder.

Ya hace meses de mi partida, acción mía, sentimiento tuyo.
Eras tan perfecta que no podías ser mía nada más,
Mirada al suelo, mentira en la boca.

Recorrí miles de kilómetros y siempre termine encontrándome en sus ojos.
Nadie sabe cuánto enojo me costó dejarte ir

Y es tanto el enojo, tanto que siento miedo de que sea amor...




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri 

TODOS LOS PECADOS.

Voy a cometer todos los pecados
Y a redimirme en tu cuerpo
Como si fuera un templo inmaculado
En el que existe todo perdón.

Mataré las ganas que me invocas
Con tu piel que sugiere una rosa,
Y cortaré de raíz todos mis deseos
Para dártelos en un ramo.

Y tendré de ti toda la miel
Que extraeré de tu centro de mujer,
Volverás a vivir en el éter
Y abrirás para mí el cielo.

Pero no dejes de volver tu vista
Y ver como tomo tu mundo
Y tu vida en mis manos

Y cometo en ti todos los pecados.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri 

UNA PRINCESA.

Una princesa es princesa
envuelta en delicadezas
no deja ver su figura
no deja ver sus proezas
solo te muestra ademanes
de cariños sublimados...
Una princesa es princesa
podrás reconocer sus pasos.

Una princesa es princesa
bañada en alegres cantos
que solo oirás en susurros
y en delicados encantos...
Camina con pasos suaves
que se agitan con el viento
lleva en silencio sus cruces
esconde cualquier quebranto…

Una princesa es princesa
cuando guarda sus amores
y espera con dulce calma
que su adalid la enamore...
tan princesa es tal princesa
que a pesar de ella amar tanto
nunca revela sus besos
que nadie ose en mirarlos...

Y su amado caballero

lunas pasará esperando... 



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

martes, 8 de agosto de 2017

LUNA VOLUPTUOSA.

Un suave aroma de café,
Que te trae un largo camino.
Amoríos de labios rojos y un clavel
Una lascivia, entre la luna y el vino...

Labios que buscan deslizarse en una piel
Buscando más que un destino
Beber de ríos provenientes del paisaje aquel
Beber y al mirar escuchar un gemebundo sonido…

Es como una sinfonía que te envuelve
Es como una sensación de un fuego ardiente
Te quema y tu placer disuelve
Te quema hasta que llega el sol naciente
Y al iluminar deja ese lujurioso anochecer

En un ayer, en un pasado, en un soñé...




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

UN AMOR PARA SIEMPRE.

Las cosas bonitas que te digo
con el tiempo se te pueden olvidar,
por eso prefiero escribirlas
para que siempre las puedas recordar.

Mis palabras las haré poemas
tan hermosos como flores en un ramo,
para que siempre me leas
y nunca te olvides de que te amo.

Pues el tiempo se llevará las palabras,
pero en mi memoria quedarán los recuerdos,
siempre estarás en mi pensamiento
y siempre recordaré todos tus besos.

Con los años nos haremos viejos
pero nuestro amor se hará más fuerte,
porque lo que siento en este corazón
no se irá ni con mi muerte.

No dejaré de amarte jamás,
soy tuyo eternamente,
somos como el cielo y el mar,

un amor para siempre. 




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

lunes, 7 de agosto de 2017

EN LA HIERBA.

Dedicado a mi amiga Paloma Cáceres.


Nos tomamos de la mano,
caminábamos sin rumbo fijo,
nuestros deseos nos llevaron
a un jardín secreto.

Nuestras miradas se entrelazaron,
ví en tí un enorme  deseo,
tus manos empezaron a recorrerme,
no quería separarme de tí en ese momento.

Tus besos hicieron
 que se me olvidara el mundo,
no sentía pasar el tiempo;
sobre la hierba nos acostamos
y empecé a conocer tu piel,
tus labios de mí no se cansaban,
mostré por primera vez mi desnudez.

Como dos ingenuos amantes
nos empezamos a conocer,
yo te amaba en el alma,
tú te diste a querer.

Mis manos acariciaban tu pecho,
empezaron a viajar,
por todos tus rincones
parecían volar.

Tus ojos enamorados
no me dejaban de mirar,
entre susurros me decías
que siempre me ibas a  amar.

Mi piel ardía levemente,
no me dejabas de acariciar,
tus manos las sentía ahora
en distinto lugar.

Fue un momento mágico
cuando besabas mis pechos,
tus dedos me penetraban,
parecían tocar el cielo.

Yo no te decía nada...
un silencio en mí gritaba,
¡hazme mujer ahora!
antes que comience el alba.

Un beso en mis labios me dabas,
sentí como a mi vida entrabas,
no había más testigos
que las flores que  nos miraban.

Mis ojos cerrados
se abrieron a tus encantos,
fue el despertar de un momento
que sentía que no terminaba.

Nunca olvidaré tu sonrisa,
nunca olvidarás mi llanto,
dijiste que perduraría,
nos hicimos un solo canto.

Sé que este amor ha crecido,
me lo dicen siempre tus versos,
yo, te regalo mis besos,

como si fuera mi último aliento.





Autor 
Antonio Carlos Izaguerri, 

MI VIEJA AMISTAD.

Me encuentro solitario, en contradicción a lo que tanto deseé.
Han pasado alegrías y banquetes de emoción opíparos
Y sin embargo, estoy acompañado por un afluente de nostalgia.
Reaparezco de entre la felicidad, irónicamente, lleno de tristeza.
No encuentro mejor confidente que la niebla melancólica.

Hoy ocurrió calamidad una vez más.
La penumbra tocó la puerta de mi habitación con su sonrisa espeluznante.
Aparece orgullosa con su tarjeta de invitación.
Qué más da, si nos conocemos de antes.

A mí diestra, la traición,
Del otro lado, los recuerdos efusivos,
Y sobre mí, una densa capa de cinismo.
Mi individualidad tiembla al enfrentar la decisión.

La noche es más helada de lo acostumbrado,
Y el deseo de dar marcha atrás
Se materializa en un abundante llanto desde mis adentros.
Un llanto que me recuerda tiempos de antaño.

He vislumbrado la salida con extrema rapidez
Y, para ser franco, me sorprende mi actitud.
Si existe señal alguna que me conduzca a un proceder contrario
Sin duda alguna, optaré por seguir tal derrotero.

El precio que hay que pagar por un razonamiento ajeno es alto,
Y justamente hoy me cuesta atender esa deuda.
Conservo el sentimiento con sólida esperanza
Mientras me siento a sentir el peso del tiempo.

Buenas noches querida tristeza,
No diré que te echaba de menos
Ni siquiera por cortesía.
Después de todo sobra decir eso.

Buenas noches, mi vieja amiga.



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

UNA BELLA AMISTAD.

Si pudiera darte algo
por cada vez que caí
y sin saberlo me levantaste

Por haberme enseñado
el valor de la palabra amistad
Mostrarme que donde se siembra cariño
Se cosecha gratitud
Que donde se hallan las personas que amas
ahí estará tu lugar

Porque puedes hablar libremente
sin temor a fallar
puedes hablar sin escuchar a la razón
o simplemente callar
Porque en la amistad
todos los sueños, pensamientos y expectativas
nacen sin palabras

Dios creo la amistad
para profundizar el espíritu
para que no sea la revelación
de su propio misterio

Se dice que lo mejor de una persona
se encuentra es sus amistades
porque pueden llenar necesidades
aun con su vaciedad...
Y yo lo sé...

Porque te he encontrado a ti.



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

¡AQUELLA MUJER!

Aquella mujer que miró el sendero
estuvo una vida buscando
morada infinita.

Fija la mirada al final del camino
y lleva consigo la caricia del viento.
Aquella mujer
humedece sus labios con el fresco rocío
corta la hierba…para adornar su pelo
camina descalza, dejando a su paso
el sonido de su andar viajero.

Aquella figura del tiempo
tiene un profundo mirar
busca en los lirios del campo
a la mariposa azul
se lleva el trinar de un árbol florido
cuelgan de su largo vestido
el arrullo del mar
el aroma de la tierra mojada
y del horneado pan.

Aquella figura plateada de luna y de río
se trepa a la brisa buscando
el sonido del aire, la flor de la vida
y su propio destino.

Ella mira el sendero
se pierde en un remolino
de rosas y nubes
entre colinas y sombras,
como enramados jazmines

aprieta ; recuerdos y sueño. 



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

domingo, 6 de agosto de 2017

CON SÍLABAS EN LA BOCA.

Hoy es una de esas noches,
Que la cólera golpea el alma,
La botella pide que la descorche,
Pero la cabeza pide calma,
Una de esas que la boca sabe a versos,
Que se vive en estrofas,
Que mis ojos lloran tus besos,
Y tú solo te mofas,
Valientemente cobarde adopto el manto de poeta,
Estaremos juntos en otro momento,
Recrearemos la misma faceta,
O esta vez te diré lo que siento,
Nunca llegaremos a ser lo que éramos,
Intentare no fallar a fingir estar enamorado,
Calmare la voz que me pregunta que intentamos,
Al menos te diste cuenta que siempre te he amado,
Y otro escuchara lo que no me dirás,
Y otro tendrá el placer de escuchar tu risa,
Cuando sientas ese frio viento en el cuello,
Seré yo preguntándote por que no paras,
Pero me queda de recuerdo el botón de una camisa,
Y la memoria de un recuerdo bello,
Aunque por cada vez que me dices que me amas,
Otras diez me dices que me odias,
Pero no me sentiré así jamás,
Y otra vez pasaran los días,
Y pensaran que estas cosas son mías,
Cuando son tuyas y de nadie más,
Me queda un beso en la almohada,
Y una pluma con tu perfume,
Ha terminado un cuento de hada,
Es otro con el que ella presume,
No soy un príncipe de los azules,
Y mucho menos un caballero de mesas redondas,
Yo estoy rodeado de males,
Y solo rezo porque tu respondas,
No salvo a los demás,
No intento ser el héroe de mi historia,
Intento mantenerme lejos de lemas,
Y que no hayan lagunas en mi memoria,
Pero si he de olvidar algo que sea tu recuerdo,
Porque contigo no puedo vivir,
Y seré otro del montón "un cerdo",

Pero por lo menos podré vivir.


Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

ME HAN DICHO.

Me han dicho que nada dura para siempre
y que siempre hay que prepararse para lo peor que venga.
Me han dicho que lo bueno dura poco
y que dura más el viento en la mano, que el amor.
Me han dicho que no se vive de sueños
y que hay que soñar con lo imposible,
aun si es posible, que nunca llegue a ser.

Me han dicho que es más feliz quien menos sabe
y que de nada sirve saber si no se sabe vivir,
aunque para el común sea vida, ser esclavo de su quehacer.
Me han dicho que de esperanzas no se vive
y que si pierdes la esperanza, ya has sido vencido
porque tampoco se ha entendido, si hay que ganar o perder.

Me han dicho que no caiga dos veces sobre la misma piedra
pero hay piedras sobre las que vale la pena caer.
Me han dicho que deje atrás el pasado
y que no olvide lo vivido para que no viva en el engaño.

Me he cansado de lo que dicen
y con cierta cortesía ante tanta controversia
me atrevo sin sapiencia a decirle a la audiencia
que hay amores que siempre son aunque terminan
y que no dura el amor que no se intenta,
que no soñar enamorado es un mal chiste
y que es posible ser feliz si se ama,
que solo sigue vivo el amante que es paciente
y que amar es lo que todo hombre aguarda,
que esperar sin amor consume
y que se ha rendido el que no ama,
que prefiero tropezar con tu piedra cada día
a dormir sin tu hombría y tu alma
que no hay peor engaño que negar el sentimiento

mientras el que amas vive en agonía.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

EFECTOS DE CUPIDO.

Mi mundo está donde te abarco
en un abrazo apretado, enfurecido
y loco, flecha fatal la de Cupido
beso mortal al que no escapo.

Flecha letal la de aquel arco
blanco en un beso enardecido
tormenta en mi ceno al descuido,
encuentro de pieles donde aparco.

Gime el universo fiel espasmo
galácticas y cósmicas estrellas
visceral recorre el entusiasmo,

soldada en mi mente sin sarcasmo
el beso enamorado deja sus huellas

ironía del sol abrazador marasmo.




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri, 

MIRANDO SIN ESTAR.

De recordarte me dormí despierto,
Te vas sin cerrar la puerta
Que frio es dormir desierto,
La desilusión del silencio,
El estar disimulado de aburrimiento.

Mirando sin estar, latiendo sin aliento,
Te miro,  no estas.  Me invade el silencio,
Y así despierto con la puerta abierta,
Entra el frio invierno como lamento.

Acá me quedo quieto durmiendo,
Entre sueños despiertos,  fríos y lentos,
Aun no es tiempo de recuerdos,
La pared   blanca  me  mira sonriendo,

Que frío es dormir despierto.



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

sábado, 5 de agosto de 2017

DISFRUTAR DEL BESO CON SABOR A ETERNIDAD.

Te dispusiste a dormir una brevedad
y cerraste los ojos
y pasaron mil años en una noche
hasta que los volviste abrir

me mantuve en vela cuidando tu reposo
y te sumergiste en un viaje
repleto de aves que se posaron en tus hombros
entonándote melodías que sonaron a mí

sobrevolaste campos de pétalos y hojas
que cautivaron a tus pupilas
entregándote colores y aromas que recrearon mi presencia

navegaste océanos repletos de rumores
que irrumpieron en tus pensamientos
saturándote de ecos que simularon mi silencio

despertaste de pronto
y tu corazón agitado buscó mis manos
-extrañaste la nube de mi tacto-
te hizo falta la lluvia de mis dedos que a tu cuerpo moja
-la calidez líquida que te quita la ropa-

no encontraste potencia alguna
que te transportara a la calma del ojo del huracán
y volviste a mí
y desesperadamente el torrente de tus venas
me llamó Amor

la noche de tu viaje resultó insoportable
y preferiste el arribo de la mañana
en la proximidad de nuestros misterios

ahora se esfuman las sombras
detrás del horizonte
y la luz de mi locura se apodera de tus labios de poesía
para disfrutar del beso con sabor a libertad
-emprendiendo el viaje a la eternidad-



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri 

EL AMOR Y LA DISTANCIA.

Siluetas indefinidas bailotean en el limbo,
Una acaricia la mano de la otra,
Dibuja en el aire, en la inmensidad del viento.
La pasión se despertaba en sus almas batidas.
El sol acaricia con sus brazos aquellas almas dormidas
Sumidas en un sueño eterno, aletargado, en el olvido.
¡El amor y la distancia nunca pueden ser amigos!
Pues el engaño y el olvido tienen sus motivos.
Aquel día en que las siluetas así pensaron
La distancia sintió el hastío.
Se alejó eternamente del mundo,
De los amantes, del ruido,
Y jamás nadie pudo encontrarse,
Porque la distancia se había perdido.
Pero el amor se aburrió de promesas rotas,
De amores de verano, de amantes desvanecidos
Y buscaba a la distancia, su eterna amiga de domingo.
Primero buscó aquí cerca,
En los montes, en los lirios,
Pero no encontraba respuesta, pues vacío estaba el nido.
Decidió buscar más lejos, donde el sol se había dormido,
Y encontró rastros calientes, de su amiga tan querida.
La encontró donde no esperaba, donde los colores brillan
Tomando café caliente, con bizcochos de achiras.
La distancia miró al amor, los recuerdos la envolvían,
Recordó el desprecio, el vacío, la burla de aquellos días.
El amor con sus suaves manos, la tomó de las mejillas
La distancia comprendió que de verdad era vida.
Aquel día del mes de junio, alma y vida se unieron
En promesas de amor eterno, en deseos de amores vivos.
La distancia le dijo al amor, yo me quedo aquí, en Huila
Debes volver a tu sitio, a tu tierra, a tu vida
Yo te estaré esperando, yo aquí, tú en la pampa dormida

Que, si es amor verdadero, durarás toda la vida.



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri 

viernes, 4 de agosto de 2017

ELLA FUE PARA MÍ.

Desde que supe que ella existía
en el alma tuve dos razones que yo no conocía:
amar y perdonar.
Y fue tanta la gracia que en mi ella atraía
que experimente dos motivos:
adorarla (igual a preservar)
 no olvidarla (igual a eternidad)
todo un total de relevantes emociones
que alborotaron mis sensaciones
de un poder sin igual,
esos fueron sin dudas mis dos sucesos definitivos
en mi lateral realidad.

Ella fue para mí, tan dulce, como un vino de dátil,
saludable como olivo silvestre,
frágil como el pétalo de una flor.
aquella carta y aquel verso que en abril yo le escribí,
llorando, triste, y feliz, a la orilla del mar,
yo la guardo aun sin quererla publicar.
Tanto fue el suspenso de mi lamento
que dos pensamientos vinieron ante mí:
el primero (sobre lo cruel del amor)
y el segundo (sobre lo bello del amar),
y en conclusión a todo esto solo puedo decir:

que la ame con principio y la amo sin final.



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

NO TARDES AMOR.

Trascurría la tarde tranquilamente,
como siempre tú no te apartabas de mi pensamiento,
tu recuerdo hacía sonreír a mi corazón.
Aunque habían pasado unos días de no vernos
para mí ya se me habían hecho una eternidad.

Una llamada cambió todo para ti,
la promesa de vernos y bailar contigo,
no querías salir... lo que más deseabas
era que estuviéramos solos tu y yo.

Dejaste todo lo que hacías,
subiste rápido a arreglarte,
no sé qué tienen mis palabras
que siempre inquietan tu piel.

No sabías que ropa usar,
recorrías todos tus vestidos,
recordando en cada uno
todas las veces que hemos estado juntos...
¿cuál me gustaría más?
¿cuál escogerías tú?
al fin te decidiste... el vestido negro
que tanto te gustaba cuando salíamos.

Solo te faltaba un poco de maquillaje,
discreto, suave, bien sabes que
no te gusta pintarte mucho
y el perfume, tan importante
cuando estamos juntos...
(te encanta cuando recorres con tus labios mi cuerpo
y te beso, sintiendo como arde
levemente el aroma de tu piel)...
perfume, vestidos y zapatos,
no necesitas nada más para mí.

Previne todo lo que te gusta,
tu bebida preferida con tres hielos,
tus bocadillos favoritos,
no deben faltar tus adorados espárragos....
¡¡¡ LA MUSICA....claro la música...!
es lo más importante, no puedo estar sin ella...
¿qué es más hermoso que sentirte cerca,
con tu aliento en mi oído mientras escuchamos
una bella melodía de amor.

No tardes amor...  no tardes más...
no quiero que se deshaga el hielo de tu vaso,
no quiero que se acabe esta canción...
me abrazaría a ti toda la vida,
escuchando esta hermosa canción.

Al fin llegas, con la suavidad
que caracteriza tu andar...
tu elegante traje, tu vestido impecable...
tu aroma que tanto me gusta percibir
después en mi traje... ay amor...
solo tú sabes cómo tratarme,
como abrazarme y hacer despertar
en mí  una salvaje pasión que habita
en la profundidad de mi amor por ti.

El abrazo no se hizo esperar...
tus labios... tus manos...
todo lo quería  palpar...
abrázame amor... no me sueltes ya...
en cuanto viste todo preparado
surgió en ti una traviesa mirada,
tus ojos sonreían... era lo que tú esperabas...

Abrazados comenzamos a bailar,
los besos no alcanzaban
para calmar mi ansiedad,
tus caricias inquietas
empezaban a brotar,
tu cuerpo encendido
empezaba yo a disfrutar.

Pero hubo un momento en que todo se calmó,
tu rostro sereno entonces apareció...
tu mano derecha por debajo del pantalón
se encontraba ya... yo no comprendía
porque seria te habías puesto ya.

Yo te preguntaba, ¿qué habías encontrado mal,
era acaso el pantalón que no te gustaba ya,
a lo mejor el perfume no te excitaba más,
o era mi cuerpo que no te hacía gozar?

Solo comenzaste a sonreír,
de tu sonrisa brotó la risa
y un ademán en tu mano
que me empezó a molestar...
dime cariño...¿qué sucede más?
entre palabras confusas
te empecé a escuchar...
-habla mi vida, no entiendo ya...

-eres una niña distraída...
todo dejaste en su lugar,
la música, la bebida, tu aroma,
bien sabes cómo me gusta disfrutar...
pero hay algo cariño que está fuera de lugar...
eso que traes en la mano y que no usaste ya...
a ver extiéndelo en la mía, no te hagas de rogar...

Estupefacto me he quedado...
no hallaba palabras que usar,
era la ropa interior lo que llevaba
y ya no había de utilizar.

Entonces un fuerte abrazo
me atrajo hasta ti...
levantaste tu vestido
y tus labios ya no me dejaron explicar,
que eran tantas tus ganas
que ese pequeño detalle me faltó...
-no te preocupes mi cielo...

era algo que nos iba a estorbar. 




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

YO SOY AMOR QUE HUELE A TI MI FLORESCENCIA.

Tengo sed de ti -mi flor-
sed de las gotas de rocío entre tus pétalos
y sed de la savia que emerge de tus entrañas
-eres poesía y esencia-
eres floración y efluvio de rosas
y yo soy Amor que huele a ti mi Florescencia

mis manos se transforman en suspiros
para recorrerte desde el suelo
hasta la humedad de tus hojas
y mis labios se transforman en cantos
para besarte desde tu dolor
hasta la virginidad de tu pensamiento

y tú te vienes conmigo
-nunca me dejas-
no puede ya el desamparo apoderarse de mí
desde que estás aquí
-oh mía-

los silencios suelen oler a sangre
por eso pronuncio tu nombre
-Florescencia mía-
el estruendo de mi dolor se ha transformado
en las pulsaciones de tu pecho para habitarte
y el susurro de mi quietud se ha transformado
en los sueños de tus ojos para dormir en tus pupilas
-en el resguardo de tus párpados-
soy noche para arrullarte y soy día para acariciarte

me beberé por ti el líquido de la muerte
para que no te quiebres

divino vaso de mi existencia. 



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri 

NO PUEDO DECIRTE QUE NO.

Jamás pensé que  alguien podía llevarse algo de ti...
Algo que fuera tan tuyo que te hiciera anhelar que regrese así como la lluvia espera en esa larga sequía para poder aparecer.
Que podías dar tu corazón sin limitantes, sin miramientos yendo por la vida como si confiaras con los ojos cerrados en esa persona.
Que podías amar la idea de un amor falso, de una dulce mentira que arranca tu corazón. Llevándose consigo lo más preciado, tu ser.
Que perderte en el juego sea el mayor motivo para sonreír mientras te destruyen por dentro. Que no puedas decir ya no!
Y esperas que la lluvia calme ese dolor, esa espera y conteste la suplica de una mentira vuelta verdad.
Sin tener miedo de preguntar si te aman, si pueden sentir lo que sientes y más allá que si eres lo suficientemente valiosa para esa persona.
Cómo decirte que no ... Si contigo me pierdo y me aferro  a lo que nunca será dejando que la vida misma me abandone.
Rogando por esa vida que se escapa viéndome consumir por un amor que no es correspondido, que no hace mas que jugar conmigo... Con mi corazón.
Esperando esa oportunidad que jamás va a llegar, desperdiciando un poco de lo que me espera, abandonandome para consagrarme a ti.
No sé que pasó para que me dejara perder por ti, que me deje abandonar por algo sin sentido, que no borra mi falsa sonrisa  Allena de esperanza porque me digas que me amas.

Aferrada a tu hechizo, perdida en tu victoria y sumida en mi derrota que me arrastra a tu lado, sin saber decir que no a ti...




Autor 
Antonio Carlos Izaguerri. 

Y SI SUPIERA QUE UNO ...

No hay muchos que quieran descubrir el tesoro conmigo.
No hay muchos que siquiera sepan que existe.
No hay muchos que tengan la llave y menos, que te la quieran regalar.
No hay muchos que sepan dónde está la flor de oro.
No hay muchos que te la quieran dar, porque no saben dónde está,
porque olvidaron y creen que se perdió.
No hay muchos que sepan que yo estoy hecho de oro, fundido de estrellas
que tu colonia es la tierra y tu país el universo.
No hay muchos que sepan que el tesoro eres tú.
Cada uno y todos juntos.
No hay muchos que estén dispuestos a regalarte una fortuna,
porque se piensan pobres y que no tienen nada.
Todos, están dispuestos a perder la vida antes de ver la verdad,  porque les duele tanto
Y el apego al dolor es  su fortuna
No hay muchos que estén dispuestos a perder el miedo,
que es toda su cultura, prejuicios sus ideas preconcebidas, manoseadas por siglos de mentira, de traición a la belleza.
No hay muchos que quieran entregarse a la belleza
porque la belleza es la verdad, es la  libertad, es la vida, es la pureza y la inocencia.
No hay muchos que estén dispuestos a vivir  conmigo el paraíso
porqué piensan que están lejos y no lo pueden ver, porque han perdido el horizonte, la vista y el instinto.
No hay muchos que estén dispuestos a amar el infinito, porqué saben que el infinito
no tiene fin y que ellos si lo tienen y me dejan a mi solo.
¿Y que yo hago aquí solo con todo el universo?
¿Qué hago con el negro si fue creado para todos?
Yo Estoy dispuesto a regalarte mi valor, mi fuera y mis afortunadas  alas de ángel,
Estoy dispuesto a regalarte la verdad y la belleza,
y estoy dispuesto a regalarte el cofre, la llave, la flor de oro y todos los tesoros.
El más grande, el negro, la belleza y la verdad,
Yo estoy dispuesto a todo por ti, a compartirlo todo, a darte el misterio y a darte todas las claves.
No hay muchos que quisieran compartir todos los perfumes, los cantos, los olores,
la esencia de cada partícula de cada grano de sal, de azúcar o de arena.
No hay muchos que quieran renunciar a su importancia personal.
No hay muchos que te quieran tanto.
Que estén dispuestos a regalarte la vida, la suya y la de todos, porque no saben que todos somos uno, solamente uno,
y yo quisiera avanzar contigo, con él, con todos en el telar del infinito,
con la música de las esferas, con toda la música de la tierra, con todos los cantos,
los rugidos, los rumores y  todos, todos los silencios.


(Un poema a tu medida)



Autor 
Antonio Carlos Izaguerri